¿Qué hay en la caja del teléfono de 1500 euros de Apple?
Gran teléfono, alguna sorpresa.
El tema es que Apple es más de pedir que de dar y pese a tener entre manos un teléfono imponente hay un par de cosillas que descubre el 'unboxing' que he querido compartir con vosotros.
En primer lugar; tenemos que hablar del cargador. Hoy en día los teléfono tienen grandes pantallas, con resoluciones muy altas y eso pide grandes baterías que pueden tardar mucho en cargar o no, según el cargador que incluya el fabricante...
El lío viene con que Apple considera que el cargador que debe acompañar al teléfono en la caja debe de ser “normal”, no el de carga rápida.
Si quieres que tu teléfono cargue rápido, toca ir a la tienda Apple y soltar otros 70 euros por el cargador rápido…
Debería ser algo significativo que otros fabricantes como Samsung, LG, Xiaomi o Huawei (por ejemplo), incluyan su “fast charger” con la compra del teléfono; la tecnología mejora y, así como recibimos mejores pantallas o baterías más grandes, merecemos poder cargarlas más rápido … pero parece que así no funcionan las cosas en el mundo Apple.
Por otra parte: los auriculares.
En 2018 ya tenemos asimilado eso de que muchos de los teléfono ‘flagship’ no tengan entrada de ‘mini-jack’ para tus cascos favoritos, por eso los fabricantes de móviles adjuntan un conversor de USB-C a mini-jack, para que puedas conectarlos.
Hasta ahora así era también en Apple, pero con el lanzamiento de los iphone XS y XS MAX, las cosas han cambiado. Si quieres un conversor para usar tus cascos favoritos, toca pasar por caja de nuevo y pagar 10 euros por el latiguillo y entonces podrás conectarlos.
Dejemos a un lado el juicio tecnológico. La tecnología con la que trabaja Apple para sus iPhone, suele cubrir de sobra las necesidades del usuario y, ciertamente, si nos tapamos el ojo que mira la etiqueta, XS y XS Max son teléfonos impresionantes y muy disfrutables.
Nos quedamos con la pequeña reflexión de que cobrando 1500 euros hay que guiñar el ojo un poquito a tu cliente y hacer la vida fácil, que la competencia es muy dura...
