Doñana podría perder el sello verde internacional

Doñana es uno de los grandes tesoros de Europa. Un mosaico de ecosistemas entre los que destacan la marisma, las dunas y los pinares, y que a lo largo de sus 122.487 hectáreas (54.251 de Parque Nacional y otras 68.236 de parque natural), repartidas entre la provincia de Huelva, Sevilla y Cádiz, alberga una biodiversidad excepcional.

Pero como todo, la naturaleza requiere cuidados y, sobre todo, respeto por parte de la actividad humana. En el caso de Doñana, ésta ha provocado que a lo largo de los últimos años este paraíso se vea amenazado, tal y como lo atestigua un nuevo informe de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), en el que diez expertos han evaluado la situación del parque.

De los 50 indicadores examinados, Doñana sólo aprueba 17

Los responsables del informe han examinado un total de 50 indicadores, de los cuales Doñana sólo aprueba 17. Además, la UICN ha puesto nota a la gestión del Parque Natural teniendo en cuenta cuatro grandes campos: buena gobernanza, diseño y planificación del parque, administración efectiva y conservación exitosa. De todos ellos, Doñana sólo aprueba el segundo, y lo hace con un 5 raspado.

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Este informe tan desfavorable podría suponer la pérdida del sello verde de calidad ambiental, que lo reconoce como un espacio que cumple unos determinados estándares de calidad medioambiental y que requiere de una especial protección. Un distintivo con el que la UICN quiere “garantizar que la vida silvestre y los ecosistemas puedan sobrevivir, prosperar y aportar valor a las comunidades de todo el mundo”, tal y como explican en su página web.

Una referencia internacional

La UICN, de la que forman parte más de 100 países y unas 1.200 ONG, es la mayor organización ambiental del mundo. Su lista verde incluye 77 áreas protegidas de 60 países. En caso de que finalmente se decidiera que Doñana ya no merece estar en ese ranking, cosa más que probable a la vista de las conclusiones del informe, se trataría del primer enclave en perder esta distinción de sostenibilidad, desde la creación de la lista, hace una década.

¿Qué supondría para Doñana salir de esta prestigiosa relación de lugares? De entrada, una importante pérdida de prestigio a nivel internacional. Perder el estatus que otorga el sello verde sería un importante revés para el Gobierno andaluz, y la respuesta a la proposición del PP y Vox de aumentar los regadíos de fresas en los alrededores del parque. Hasta ahora, todas las voces de alarma la habían dado los ecologistas en forma de advertencias, pero el informe de la UICN invita a tomarse, más en serio que nunca, la protección de este lugar único en el mundo.