Beyoncé: agente del FBI, cantante de ‘nighclub’, ex amante de Austin Powers y “toda una mujer”

Beyoncé "estaba muy nerviosa". Tanto en las audiciones como en el rodaje. Era su primera gran película y "una nueva forma de crecer como artista". El 26 de Julio de 2002, la futura ‘Queen Bey’ se convirtió en Foxxy Cleopatra: agente del FBI, cantante en un club nocturno y ex amante de Austin Powers. Ese día, además de hacer viral la frase, “soy toda una mujer”, Beyoncé dio un paso determinante en su camino hacia el estrellato.

A sus 21 años, Beyoncé estaba impaciente por demostrarse a sí misma que podía ser actriz. En esa época, cuando la banda que capitaneaba, Destiny’s Child, promocionaba el álbum Survivor con una larga gira por diferentes partes del mundo, recibió la llamada. La que marcaría su transición hacia la superestrella que hoy todos conocemos. En 2002, Beyoncé co-protagonizó, junto a Mike Myers, ‘Austin Powers in Goldmember’ (en España, ‘Austin Powers en Miembro de Oro’), tercera y última entrega (hasta ahora) de la popular franquicia. Completaba el elenco de figuras como Michael Caine, Michael York, Robert Wagner o Seth Green, entre otros muchos.

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Aunque ya había debutado en 'Carmen: A Hip Hopera' en 2001, este era su primer gran salto al cine. Su papel era el de una audaz agente del FBI, ex amante de Austin, que pasa las noches como cantante de ‘nightclub’ en Studio 69. Ella misma se presentaba en el filme con la que sería su famosa frase viral: “Soy Foxxy Cleopatra y soy toda una mujer”.

Tanto el director, Jay Roach, como su equipo, tenían claro que querían a una actriz negra para ese rol y la representante Sharon Sheinwold les recomendó a Beyoncé. “Es realmente especial”, les dijo. La joven Knowles-Carter se presentó a dos audiciones. “Estaba muy nerviosa”, contaba el productor de la cinta, John Lyons, a Vulture: “Tina, su madre, fue con ella, para apoyarla moralmente, y estoy seguro, para evaluarnos y ver si íbamos a ser respetuosos con su hija y si la merecíamos”.

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Después de la primera prueba, “estaba convencida de que no me iban a coger”, dijo la cantante en Newsweek. Y cuando la volvieron a llamar, “regresé vestida con un traje a lo Pam Grier (protagonista de ‘Foxy Brown’ o ‘Jackie Brown’), con una peluca afro. Había memorizado cada una de las escenas que se habían hecho en los ‘blaxploitation’ (filmes de explotación negra)”. Según reveló en la BBC, “Mi madre adoraba a Pam Grier. Adoraba a Foxy Brown. Tuve la oportunidad de conocerla a los 15 años. Antes de hacer la película, vi cada una de las películas que pude encontrar. En la audición con Mike, era incapaz de hablar a no ser que lo hiciera como ella. Ella me ayudó muchísimo. En ella es quien basé todo mi personaje”.

Cuando ya la decisión estaba tomada, se reunieron todos: “Nos sentamos con Beyoncé y su madre en la azotea de la habitación a Mike Myers, en el glamuroso hotel Chateau Marmont, y hablamos de las posibilidades que tenía el personaje”, explicó Jay Roach en Vulture. “Su madre estaba muy a favor de las películas de explotación negra. Dijo que ese era el ADN Foxxy. La madre fue genial y aportó muchas ideas. Beyonce y Mike congeniaron rápidamente. Puedo decir que había química entre ellos. Recuerdo que consideramos a alguna otra persona, pero Mike diseñó el personaje para Beyoncé”.

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Empezó el rodaje. “Cuando ella apareció, todo el mundo se quedó asombrado. Todos decían, ‘¡Oh, Dios mío!. Esta mujer es una belleza’”, rememoraba Jack Gill, coordinador de escenas de la cinta. “Llegó vestida con su look de los 70s, y entonces, cuando hizo las primeras escenas… podías darte cuenta de que actuar no era su principal fuerza. Mike intentó ayudarla, bromeaba con ella para hacerla sentir más cómoda…. ella sentía que su ejecución no estaba a la altura”. Beyoncé reconocía en BBC: “Estaba muy nerviosa. Realmente, no sabía lo que estaba haciendo. Estaba tan agradecida de haber conseguido esa oportunidad… Sentía como si fuera un nuevo capítulo de mi vida, una nueva forma de crecer como artista”.

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El equipo de rodaje al completo recuerda que su entusiasmo contagió a todos, incluido a Mike. También que parecía tímida, que transmitió honestidad y autenticidad, y que era muy responsable. Su padre y su madre estaban allí mirando. Cuando grabaron el número musical, en la primera toma, lo clavó. Estaba en su medio. Ahora no estaba nerviosa. Sabía exactamente lo que estaba haciendo. Todos se quedaron con la boca abierta. Nadie sabía realmente por qué la habían elegido para este papel, y entonces todos lo entendieron. Repitieron la escena una y otra vez… y las clavó todas. No mostró cansancio.

Como era habitual en los 80s, 90, y 2000s, las películas tenían bandas sonoras que podían generar un single para la promoción. Teniendo a Beyoncé en sus filas, no podían desaprovechar la ocasión. Pharrell Williams y su compañero de Neptunes (Chad Hugo) co-escribieron Work it out con Beyoncé. Se convirtió en su primer single en solitario. Pero su sonido retro funk no conectó con el público. La canción nunca entró en las listas Billboard Hot 100.

Matthew Rolston, director del vídeoclip, manifestaba en Vulture: “Una de las principales cosas que recuerdo del rodaje es que ella estaba muy cansada. Estaba exhausta. Había estado de gira con su grupo, creo que por Europa, y voló a Nueva York, toda la noche, para el clip. Fueron varios días de rodaje y después ella tenía que regresar para seguir con el tour. Creo que había dormido dos horas. El primer día de ensayo, se golpeó con el micrófono un diente y se astilló el borde. Tuvo que ir a un dentista estético para que se lo arreglara”.

‘Austin Powers in Goldmember’ se estrenó en Estados Unidos el 26 de Julio de 2002. Se considera el verdadero descubrimiento de Queen Bey. Solo un año después, debutó en solitario con Dangerously in love (2003). “Fue un importante momento en su carrera, un auténtico punto de inflexión”, aseguraba Rolston. “Tanto su debut como actriz como su carrera como solista en el pop, ambas cosas al mismo tiempo, habían sido cuidadosamente calculadas por su madre y su padre”.