Festival Cala Mijas 2023, día 3: un adiós sobre el escenario, un hasta pronto para el público

Las últimas veces suelen tener ese aroma a despedida, aunque el Cala Mijas 2023 ha sido una excepción hasta para eso. Su tercera jornada era, para muchos, la más intensa de la edición; y no por otro motivo que no fuera la mezcla definitiva de nombres internacionales en su cartel.

El único día que amenazó con lluvia no asustó a los festivaleros, que seguían decididos a aguantar el calor si lo requería el horario de sus grupos favoritos. Y es que, si Florence Welch no se iba a perder su cita con el Cala Mijas pese a su reciente operación y la dedicación que le pone a cada uno de sus movidos shows, ¿cuál es la excusa de los demás?

En el recinto Cala Mijas no había resaca, ni calor, ni frío. Ni si quiera tristeza por la despedida. Había ganas de saltar, cantar y de mucha, mucha rave. Y ni que decir tiene que, gracias a sus últimos anfitriones, todo el mundo tuvo una buena ración de las tres cosas.

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Despedidas en directo

Ballena, Niños Luchando y La Plazuela fueron los encargados de ir recibiendo a los calamijers más ávidos de su última jornada, desde luego demostrando que las ganas no se quitan ni con dos días previos a tope. La amenaza de lluvia venía amenazando desde el día anterior, aunque lejos de disfrutar de alguna gota —refrescante cuanto menos en este inicio de septiembre— se volvió al calor.

José González y Judeline despidieron al sol, provocando otra vez ese baile entre escenarios que tan bien ha sabido calibrar el festival. El tiempo entre el final de un concierto y el inicio de otro permitía a los presentes no perderse nada, aunque una gran parte se concentraba en el escenario Victoria para esperar al nombre más peculiar de la noche: Duki.

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Es evidente que su fama le precede, aunque su presencia en el festival ha sido una sorpresa desde su anuncio hasta el inicio del show. Un show en el que no faltó freestyle, un recorrido por sus éxitos y una visita al público; o en otras palabras, todo lo necesario para dejar claro que quería terminar su gira española por todo lo alto.

El ritual de Florence

Pero si hablamos de últimos conciertos, el argentino no era el único que decía adiós a los escenarios por un tiempo después de estar en Mijas. Florence Welch, que ya aclaró que no se perdería su cita malagueña pese a su reciente operación, también acudió al concierto sin variar el setlist que hemos visto a lo largo de su gira, pero con la misma energía que en cualquier otra fecha.

Cualquier fan de la británica sabrá que su paso por el escenario se basa en fusionarse con la música y sentirla sin importar los movimientos... Y eso fue exactamente lo que hizo. Muchos temían que se resignara a estar cerca del micro, pero no tardó ni cinco canciones en bajar con el público y hacer de las suyas.

Saludó al público, cantó con ellos y llegó a desafiarlo todo subiéndose a la valla que le separaba de los asistentes. Sin embargo, su vuelta al escenario tampoco fue tranquila, pues inició sus tradicionales rituales. El primero coincidió con Dog days are over, tal y como lleva haciendo años.

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Tras su petición de "guardar el puto móvil" —palabras textuales de la artista— para poder sentir el tema, siguió con otros clásicos de su repertorio y una masa de gente de lo más entregada; dispuesta a saltar, encender la linterna de su móvil e incluso a abrazar a la persona que tenían al lado. El resultado, teniendo en cuenta que fue el concierto más multitudinario de la jornada, fue impresionante.

Le costó más a ella abandonar el escenario que al público dirigirse hacia los otros dos puntos del recinto, quizá porque aquello era una despedida doble. Florence eligió Mijas como última parada de su gira, a la vez que la noche se iba acabando. Solo Belle & Sebastian, The Blaze y una performance de Arca de lo más esperada pudieron con aquello de cerrar por todo lo alto. Ni que decir tiene que lo consiguieron. Y ahora, ¡nos vemos el 29, 30 y 31 de agosto de 2024!