Emma García defiende al reportero de ‘Fiesta’ con el que Rodolfo Sancho tuvo un encontronazo a su vuelta a España

Rodolfo Sancho ha estado en Tailandia visitando a su hijo, Daniel Sancho, que se enfrenta a un futuro bastante complicado. Confesó el asesinato de Edwin Arrieta y ahora permanece en prisión a la espera del juicio. Un mes después de los hechos, ha recibido la visita de su padre.

El actor no se había pronunciado más que por vía comunicado o a través de portavoces sobre lo sucedido. Pero ahora que ha salido a la calle, se ha tenido que enfrentar a las preguntas de los periodistas.

“Para esa parte de la prensa que creen que yo estoy tirado por los suelos llorando, ese no soy yo. Hay dos formas de tomarse cuando vienen las cosas en la vida, como una desgracia o como un reto, creo que he dicho suficiente. Entonces, no van a conseguir lágrimas de mí”, decía en Tailandia a los periodistas. Palabras que denotaban su malestar con todo lo que está sucediendo.

Un día después pedía disculpas por sus comentarios: “Como os imagináis ayer salí de un momento complicado ahí dentro. La imagen que di fue quizás muy dura, quizás prepotente. Siempre he tenido una sonrisa con la prensa. Ha sido un mecanismo que uso para sentirme firme, para sentirme fuerte y para ayudar a mi hijo".

La vida en la cárcel

Desde allí hablaba de la situación de su hijo en Tailandia que ha podido conocer de primera mano tras visitar en tres ocasiones a su hijo en la cárcel de Koh Samui. "Estoy gratamente sorprendido, me he quedado muy tranquilo", aseguraba.

"Está cuidado por gente tremendamente amable, que es lo que me he dado cuenta, que es la gente en este país", añadía, “está muy bien alimentado, incluso ha cogido peso".

Asegura que los funcionarios y agentes del centro están muy atentos a su adaptación. "Ellos tienen un gimnasio, donde hace boxeo y Muay Thai, que le encanta", explicaba.

"Me han dejado estar mucho más tiempo con Daniel del que estaba pre visto y estipulado”, aseguraba. Y en cuanto al tiempo que han pasado juntos dentro del centro, ha resaltado la flexibilidad y el respeto: "Han entendido que son conversaciones íntimas entre padre e hijo, también con los abogados y han sido totalmente respetuosos".

Vuelta a España

Tras visitar a su hijo ha vuelto a España y tenía más periodistas esperándole en el aeropuerto. Uno de ellos, José Manuel Ávila, reportero de Fiesta que cometió un error al hablar con él.

Rodolfo Sancho llegaba con pocas ganas de hablar. “Ya dije que no iba a hablar más, ya está. Ya te he dicho que no voy a hablar, tío, ya te lo he dicho. Podéis hablar con Carmen y Ramón -sus portavoces- para que no me andéis preguntando a mí", decía nada más llegar, “¡qué pesados! Que no voy a hablar”.

El reportero de Fiesta insistía y le preguntaba si iba a volver a Lanzarote ahora que estaba de regreso a España. En realidad, quería decir Fuerteventura donde reside el actor. “Estás mal informado, tío. Parece mentira que después de todo esto digas Lanzarote”, le respondía el actor ante su error.

Una reacción que, a Emma García, que volvía este fin de semana a su programa, no se ha tomado muy bien. “No sé si eso es tensión, mal viaje o desde luego la situación que le supera”, expresaba sobre lo sucedido.

“Entendemos el mal viaje, la mala situación y me gustaría saber cómo reaccionaría yo en este caso. Pero a esto precisamente, este lapsus no lo tiene que pagar con nuestro querido José Manuel Ávila”, añadía.

El reportero tenía la oportunidad de explicarse en plató. “Cuando Rodolfo llega al aeropuerto lo cierto es que le vemos muy serio desde el principio. Nosotros le instamos a que nos atendiera unos segundos para no tener que ir detrás de él. Pero él pasa de nosotros y lo cierto es que cuando él llega a un ascensor, baja, y la prensa le seguimos porque tenemos que hacer nuestro trabajo. Y yo le pregunté lo de Lanzarote, lo cierto es que me equivoqué y él no se lo tomó bien. Creo que la presión le pudo”, intentaba justificar su comportamiento.

Eso sí, aseguraba que “tiene que tener en cuenta que la prensa española ha sido bastante generosa tanto con la familia Sancho como con el propio Daniel. No es que hayamos protegido al asesino confeso, pero creo que nuestro trato ha sido bastante bueno”.

“Jota, no quiero que te justifiques más. A todos nos ha pasado y nos equivocamos y aprendemos de nuestros errores. Y lo que no nos gusta nada en absoluto ni de él ni de nadie es que paguen sus frustraciones, su enfado, el mal viaje y su situación con quien menos se lo merece y el más débil”, insistía la presentadora.