Laura Bozzo protagoniza la primera amenaza de abandono de ‘Gran Hermano Vip 8’ nada más empezar
La presentadora peruana que triunfa en la televisión mexicana es todo un terremoto
Puede que muchos en España no conozcan a Laura Bozzo, otra cosa es el público latinoamericano. La presentadora de televisión peruana, es uno de los fichajes de Gran Hermano Vip 8 y nos ha bastado una gala para saber que va a ser uno de los platos fuertes.
"¡La momia está de regreso!, que se preparen en la casa porque la voy a incendiar". La peruana entró con esa fuerza a la casa demostrando que es puro fuego.
Es consciente de que muchos la quieren, “sobre todo las clases más populares y humildes donde yo he sido la defensora, y odiada por otros que quisieran quemarme como a una bruja de Salem”. Y es que sus programas en México, llenos de salseo, con mucho sabor de reality, la han convertido en una mujer controvertida. Lo comprobaron cuando entró en La casa de los famosos el pasado año.
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“Vengo para que la gente me quiera, vengo para que la gente aprenda de toda esta vida terrible que he tenido del cielo al infierno y de todas mis experiencias. Vengo a demostrar que a cualquier edad las mujeres podemos hacer que los sueños se hagan realidad”, decía en su conexión con Marta Flich.
Y aseguraba que si estaba ahí era por mujeres pioneras, recién fallecidas, como María Jiménez y María Teresa Campos de las que quiso acordarse en este momento tan intenso para ella.
Momentazos
En su entrada en la casa ya nos ha dejado momentazos como ese en el que se estaba cambiando de ropa y, ajena a las cámaras, se ha desnudado y al quitarse la camisa ha dejado su pecho a la vista sin ningún tipo de intención de ocultarlo.
También nos ha llamado la atención su seguridad al asegurarle a Sol Macaluso que está embarazada después de que la periodista le dijera que sufrió el aborto de sus gemelos hace un mes, pero que siente síntomas de embarazo desde hace seis días.
Pero, sin duda, la tensión ha llegado cuando había que decidir por un juego quiénes de los concursantes se iban a vivir esta primera semana a la cueva prehistórica del sótano con las incomodidades que eso supone.
Amenaza de abandono
En una piscina de bolas había que encontrar las cinco que tenían el ojo de Gran Hermano. Laura ha dicho que ella no jugaba, que era casi tan conocida como el mismísimo Dios y que no necesitaba acabar en una cueva. “¡Yo me voy! Quiero hablar con alguien de producción", gritó encolerizada.
Esta primera amenaza de abandono se ha quedado en un susto porque Luitingo que había conseguido dos bolas le ha dado una a Michael Terlizzi que, a su vez, se la ha cedido a Laura después de que Karina le diese permiso.
De este modo, él, Carmen Alcayde, Luitingo, Luca Dazi, Albert Infante, Pilar Llori y Gustavo Guillermo son los inquilinos de esa cueva. Y, de momento, nadie abandona.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...