Realme hace pruebas con la carga de batería más rápida del mundo.

La carga rápida es uno de esos salvavidas sin los que no podríamos hacer vida normal. Uno se olvida de cargar el teléfono antes de acostarse y ya no hay que preocuparse, una recarga rápida de buena mañana y ya tenemos suficiente “jugo” para afrontar la jornada.

Realme quiere dar un paso más allá con su Realme GT5, que tendrá una carga de 240W, permitiendo una carga completa de 0 a 100% en 10 minutos, y tener un 20% en solo 80 segundos, según afirma el propio fabricante.

Es impresionante ver el ritmo de desarrollo en la industria de la carga rápida, sobre todo si pensamos en los humildes comienzos de los smartphones, con sus limitadas velocidades de carga hace no más de una década.

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El cargador que lo hará posible no va a ser un ladrillo, pero casi. El pack completo pesa unos 210 gramos en total: 170 gramos para el cargador y 40 gramos para el cable.

El Realme GT5 tiene una batería de doble celda de 4.600 mAh, con una capacidad de 2.300mAh cada una. Cuenta con un sistema de enfriamiento de nueve capas que garantiza que el apartado térmico no se salga de lo normal, y un total de 60 capas de medidas de seguridad.

También se ha asegurado que la carga ultrarrápida no degradará la batería más que la carga normal. De hecho, Realme ha hecho sus pruebas exhaustivas, y la batería retuvo el 80% de su capacidad inicial después de 1.600 ciclos de carga, que es el doble de los 800 ciclos a los que se comprometen la mayoría de fabricantes.

En el análisis realizado por GSMArena, el Realme GT5 240W logró una carga completa en exactamente 12 minutos y 10 segundos. No son exactamente los 10 minutos anunciados, pero aún más rápido que cualquier otro teléfono inteligente que no se llame Realme GT3.

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GSMArena pudo comprobar la velocidad de carga, con los siguientes resultados: a los 30 segundos de empezar la carga el móvil estaba al 8%, llegando al 15% al alcanzar el minuto.

A partir de ahí declaran que la carga fue “a todo gas y sin frenos”, ya que el GT5 240W alcanzó una carga del 20% en 80 segundos, tal como lo publicita Realme. Luego progresó de manera constante hasta el 50%, alcanzado a los 4 minutos, y el 80% a los 8 minutos.

Las cosas se ralentizaron un poco después de eso (algo normal), y alcanzaron el 97% a los 11 minutos. Algo más lento de lo prometido, pero las condiciones de carga no son las mismas que tiene la compañía durante el desarrollo.

Mencionan que la temperatura ambiente juega un factor importante en el tiempo de carga, y que su prueba se llevó a cabo a una temperatura ambiente de 23 grados. El teléfono se mantuvo encendido para las pruebas y revisaron la pantalla numerosas veces para ver cómo progresaba la carga, lo que probablemente contribuyó a la diferencia entre lo prometido y los resultados obtenidos.

Parece que el GT5 de 240W no se calentó excesivamente durante el proceso, solo levemente, nada fuera de lo común. El cargador se calentó, pero no más que cualquier otro cargador normal.

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Su conclusión es que Realme (y el resto del grupo BBK al que pertenece la marca) está a la vanguardia de la carga rápida, superando una y otra vez sus límites. Obtener una carga completa del teléfono en menos tiempo del que se necesita para preparar el desayuno por las mañanas es una experiencia que parecería ciencia ficción hace unos pocos años.

Solo hay que esperar a que esta tecnología de carga llegue a cuantos más teléfonos mejor sin tener que esperar demasiado.