Especial
Sofía Vergara y Pablo Motos, duelo diálectico en ‘El Hormiguero’ con un claro vencedor para la audiencia
Ambos confiesan una de sus adicciones
El 25 de enero, Netflix estrena la serie Griselda y Pablo Motos ha invitado a su programa a su creadora y protagonista. Sofía Vergara se pasaba por El Hormiguero para divertirse y vaya si lo hizo. No podemos decir lo mismo del presentador que tuvo que ir encajando zasca tras zasca de la actriz.
“No te creo ese cuento de que te la viste toda”, empezó diciéndole cuando Pablo aseguró que había visto los seis episodios sobre esta mujer que según Pablo Escobar era el único hombre que le daba miedo. No lo arregló cuando se equivocó al decir el nombre de su personaje. Pablo se refirió a Griselda Marcos cuando, en realidad, es Griselda Blanco. “Como él se la vio toda entera la serie… Sabía que te iba a coger… Eso te pasa por mentiroso”, insistía la actriz.
Una serie que trata sobre el narcotráfico en Colombia en su época más dura, una época que Vergara vivió en primera persona. “Mi hermano, desafortunadamente, fue parte de ese negocio. Mi hermano lo mataron en el 96 en Colombia y tuve que traer a toda mi familia a Miami. Fue una época muy difícil en Colombia”, explicaba.
Y es que si algo tiene Vergara es su naturalidad al hablar de lo que quiera sin prejuicios ni complejos. A estas alturas ya no tiene nada que demostrar y lo sabe y eso le da las tablas para convertir las entrevistas en juegos dialécticos con los que ganarse al público y no ponérselo fácil al entrevistador.
Empresaria de éxito
Ella explicó que después de Modern Familyla tenían anclada en la comedia y por eso tuvo que crear ella este drama de Griselda. Motos le contestó con la retahíla de empresas que ha montadola actriz en el mundo de la cosmética, el managment y otros campos. “Tienes un montón de empresas, supongo que hay gente que te las lleva porque tú no harás nada”, le dijo.
“No, yo no hago nada, yo todo lo compro hecho”, respondía ella, “ahora hago menos, la verdad, ahora tengo más gente que me haga las cosas, para qué te digo mentiras”. Siempre tuvo visión. Su primer gran negocio fue hacer un calendario con fotos suyas, algo que en el mercado norteamericano estaba muy presente, pero no en el latino.
Bromeó sobre cuál sería su próxima empresa: “Mi marca de maquillaje se llama Toti y a mi empresa de cocaína le voy a poner Coti”. Tras asegurar que era una broma añadió que “estos chistes no se deberían hacer, ¿por qué haces estos chistes aquí? Yo no voy a hacer esa asquerosidad, él me obligó a decir eso”.
Adicciones
Luego pasó a hablar de sus hábitos saludables. Reconoció que no había fumado nunca hasta ahora que tuvo que aprender a hacerlo para bordar su personaje. Bebe, pero no todos los días, “un día sí y otro no”. Desde los 90 se echa crema para el sol, aunque lo más saludable, es pasarlo bien con su familia. “Me encanta todo lo que sale nuevo de vitaminas y esas cosas. Tengo un problema muy grande, me encanta el dulce y me toca controlarme. Tengo una adicción al azúcar”, reconocía.
Llegaron al acuerdo de intercambiar sus chocolates, de los dulces. Cuando Sofía supo que Motos no lo tenía a mano le hizo una pregunta que despertó carcajadas: “¿Qué comes mientras estás atrás payaseando?”.
También hablaron de amor. Se ha divorciado no hace mucho de Joe Manganiello y les pidió a las hormigas que le presentaran a un hombre. Eso sí tenía requisitos: cincuentón, con igual dinero o más que ella y no excesivamente guapo.
Un duelo dialéctico durante todo el programa con un claro vencedor según la audiencia.
Brava Sofía Vergara.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...