¿Cómo elige Bizarrap con qué artista grabar?
Sus ‘BZRP Sessions’ se han convertido en uno de los formatos más codiciados de la industria
Bizarrap en los Latin Grammys de Sevilla, 2023 / Samuel de Roman
Bizarrap volvía a revolucionar el panorama esta semana desvelando la protagonista su próxima BZRP Music Session; nada más y nada menos que con Young Miko, la reggaetonera puertorriqueña que se ha convertido en otro referente global en la música urbana.
El revuelo ocasionado tras el anuncio y la elección de Miko como el último lanzamiento -teniendo en cuenta, que el argentino tendría en la recámara varias sesiones grabadas con otros artistas- nos han llevado a preguntarnos, ¿cómo elige Bizarrap con qué artista grabar? ¿Y cuándo elige sacar finalmente la canción? Repasamos algunas claves para entender un poco mejor una de las mentes más innovadoras del género urbano.
La elección del artista
Bizarrap empezó a producir en el mismo cuarto que vemos en sus sesiones hace 10 años. Nada más y nada menos que la habitación en casa de sus padres que ahora mismo replica a la hora de grabar. Aquí subió sus primeras sesiones empezando con las freestyle sessions colaborando, sobre todo, con intérpretes argentinos emergentes (Bhavi, Sony, Lit Killah, ACRU…). Varios de ellos pertenecían al mundo de las batallas de gallos, un ambiente donde Biza empezó a moverse haciendo remix de batallas de rap y canciones.
En 2019 el artista firmaría con la discográfica Dale Play, liderada por Federico Lauria, también mánager de otros artistas como Duki o Nicki Nicole. Fue precisamente con la trapera argentina con quien alcanzó su primer éxito, llevando la sesión a lo más alto de las listas en varios territorios. “Fue nuestro primer éxito, era la primera mujer que grababa y fue número 1 en un montón de países. Ahí vio en qué se podía convertir”, reveló Lauria en una entrevista con Billboard.
A medida que el proyecto fue creciendo, podemos ver en sus Bizarrap Sessions cómo los featurings se internacionalizan un poco más, metiendo a artistas españoles (Don Patricio, Bejo, Ptazeta, Morad…), mexicanos y puertorriqueños, llegando a incluir a verdaderas estrellas del panorama en solo dos años, como Nicky Jam, Eladio Carrión o Anuel AA, entre otros.
Aunque Bizarrap nunca ha revelado cuál es la verdadera razón por la que elige grabar con algunos artistas y no con otros, sí ha dado varias pistas sobre los factores en los que se basa. El principal, tiene que ver con una razón simbólica: brindar visibilidad a algunos de los intérpretes. “Siento que mi posición actual es la de darle visibilidad a los artistas”, reveló el productor en una entrevista. Esa sería la razón por la que el argentino está acostumbrado a innovar, viralizando voces y estilos nuevos y configurando una marca propia.
Hemos sido testigos de esto en varias ocasiones con algunas verdaderas bombas que se han convertido en hits, como la BRZP Music Sessions #51 de Villano Antillano, la #39 de Snow Tha Product o la #38 con L-Gante, y la que es su más conocida hasta ahora, la #52 junto al reggaetonero Quevedo, que consiguió batir varios récords, llegando al número 1 en la Billboard Top Global Charts y en la lista Global de Spotify.
Cuestión de conexión y timing
“Yo solamente hago la música que siento en el momento y generalmente me guío por la música que estoy haciendo en esa etapa de mi carrera”, indicaba el argentino en El Hormiguero el pasado julio. En varias ocasiones, Bizarrap ha expresado que sus decisiones creativas tienen mucho que ver con el timing, el momento en que desarrolla la canción con el artista. Algo que hemos podido percibir muy claramente en alguno de los beefs que ha producido, como en la sesión 49 con Residente o en la #53 con Shakira, el hit post-ruptura del año. También en mitad del éxito de los corridos tumbados con Peso Pluma para la #55 o con Rauw Alejandro en la #56 antes de sacar su último álbum, Playa Saturno.
La session en sí, en realidad, parece tener mucho que ver con qué punto se encuentre el intérprete en cada caso y la conexión creativa entre ambos. “Me gusta trabajar al mismo tiempo con el artista que viene al estudio. No soy de preparar el beat antes. Prefiero hablar, ver en qué situación está él. Le pido que me muestre música qué está haciendo en ese momento. Y después doy mi punto de vista y digo: ‘Conmigo creo que debes hacer este tipo de canción’. Me gusta conectar antes de empezar a trabajar”, revelaba en su entrevista con la revista TIME.
Esto explica, además, el paralelismo entre las sesiones de Milo J (#57) -que prácticamente acabó convirtiéndose en un EP completo- y Young Miko (#58). Milo es una joven promesa del género urbano en Argentina que con solo 16 años acumula más de 19 millones de oyentes mensuales en Spotify, mientras que Young Miko se ha convertido este pasado año en una superestrella del reggaetón a la edad de 25 años. Ambos artistas se encuentran en un punto similar de sus carreras, una etapa de crecimiento, de auge; un período de emergencia donde a Bizarrap parece sentirse cómodo entrando al juego para rematarlo con una session de éxito.
Está claro que solo el argentino y su equipo conocen sus métodos y razonamientos a la hora de trabajar, pero siguiendo de cerca sus éxitos cada vez podemos entender más cómo estos se construyen, ¡y nos encantan!
Ana Rojas
Redactora y CM de LOS40 USA. En LOS40 escribo sobre pop culture, artistas urbanos, música latina y mucho...
