Saiko deja de piedra a Broncano con su regalo en su visita a ‘La Resistencia’ tras hablar de la retirada de Quevedo
También trata temas escatológicos como la caca y el apéndice y responde a las preguntas clásicas
Saiko en el Cocacola Music Experience / Juan Naharro Gimenez
Saiko se pasó por La Resistencia y demostró, una vez más, su naturalidad a la hora de hablar. Llegaba para presentar su próxima gira. Le llevaba a David Broncano una caja de piononos y confesaba que nunca los había utilizado para una primera cita porque prefiere ir sin comer, “para evitar sustos”. Nunca se sabe si a uno, con los nervios del momento, le entren ganas de cagar.
“Ahora con mi novia, cagamos de la mano”, aseguraba el granadino que explicó que “tardé varios meses en empezar a cagar con ella. Yo a mis colegas les ayudo, pero a mí nadie me ayudaba. Y no dudó en contar sus métodos para ir al baño cuando está de gira.
“El problema no es el sonido, el problema es todo el ambiente”, admitía cuando Broncano le daba algún consejo sobre utilizar la cisterna.
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El apéndice
Por cierto, que los piononos no fue el único regalo que llevó el cantante, también le llevó una camiseta personalizada del CF Granada y algo más. Estuvo a punto de pasar por el programa hace un mes, justo el día antes de que le operaran de apendicitis. “ahora he descubierto que el mundo se divide entre los que tienen apéndice y los que no tienen apéndice”, aseguraba.
El caso es que le llevó al presentador una réplica de su apéndice. “Esto es muy desagradable”, decía Broncano. “Es representativo por lo icónico, que el día de La Resistencia me operaron”, explicaba.
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Y la réplica consistía en una uva partida por la mitad en un vaso y cuando le preguntaba si había visto algún apéndice y si realmente se parecía a uno, no se cortaba un pelo al afirmar que no. “Yo también pensaba que no sabía si esto representa cien por cien científicamente, yo no he visto ninguno, puede ser”, explicaba.
Ahora está recuperado y llevando una dieta healthy, que no la está disfrutando, pero le está ayudando a llegar al verano no con six pack, pero sí, “sin el uno que tenía antes”.
La retirada de Quevedo
En cuanto a sus amigos en la industria, destacó su buena relación con Lola Índigo o con Quevedo. “Yo es que me llevo bien con todo el mundo”, aseguraba. Y cuando Broncano le preguntaba si es cierto que Quevedo se ha retirado, se comportó como buen amigo al explicar que “yo de eso no puedo decir nada”.
Saiko aseguraba que eso de retirarse tan joven o de tomarse un tiempo solo lo puede entender el que lo ha vivido, igual que la ansiedad que admitió que él padece. “Yo voy a mi psicólogo, pero si tú me hablas hace cinco años de la ansiedad, me la pela porque no sé lo que es y no pienso que nadie puede sufrir por eso”, expresaba, “es como el Pedro, sé que es complicado decir quiero desconectar y ser una persona normal porque no puedo salir de mi casa”.
Además, recordó que el día que Quevedo estuve en La Resistencia, apenas tenía voz y explicó que fue porque el día antes había estado en su concierto y él le acompañó al programa. Ya se habían conocido en aquella ocasión, aunque Broncano, en aquel entonces no supiera quién era. “Me pusiste muy nervioso, impresiona”, confesaba Saiko sobre aquella ocasión.
Preguntas clásicas
En cuanto a las preguntas clásicas, después de dejar claro que no está con ninguna discográfica y él paga todo lo de su carrera y los videoclips son carísimos, puede asegurar que tiene como medio millón de euros.
En cuanto al sexo en el último mes, tras echar cuentas, admitió que tendría como 15 puntos. “Piensa que mi novia es de Barcelona y yo de Granada, entonces, hay que coordinarse”, desveló y a Broncano le pareció un héroe entonces obtener esa puntuación pese a la distancia.
El regalazo
Y quedaba un cuarto regalo, pero se hacía esperar. “Es que es muy gordo”, aseguraba el cantante al principio del programa. Al final de la charla, para descubrirlo, tenían que salir a la calle.
Allí se encontraban con una Saikoneta customizada para Broncano que no dudaba en montarse y marcharse en ella con Saiko de copiloto. Regalazo.
Está claro que Saiko hace las cosas de manera diferente y sabe dejar huella allá donde va.
