Núria Marín, más diosa que nunca: Hablamos de Aitana, pezones percheros, pis postcoital, Marta Díaz o la reina Letizia

A estas alturas no hace falta que presentemos a Núria Marín, sus más de 20 años moviéndose por os medios de comunicación avalan su popularidad, sobre todo, tras su etapa en Mediaset como presentadora de espacios como Cazamariposas, Socialité o Sálvame. Es una de las reinas del salseo de nuestro país que mejor ha conectado con el público más joven y destaca por su frescura y su cercanía a las redes sociales.

De hecho, tras su salida de la gran cadena televisiva donde pasó tantos años, se centró en su faceta de influencer que le ha dado muchas alegrías. A día de hoy, compagina ambos medios y lo mismo la vemos presentar un programa de citas en la televisión catalana como compartir una entrega de su Royal Salseo.

A todo eso se une ahora su debut literario. Ese sentido del humor que derrocha en televisión lo ha trasladado a Soy Afrodita, su primera novela. Una comedia romántica contemporánea que toma como base la mitología griega para ofrecernos la historia más surrealista que podrías llegar a imaginar.

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Hay historia de amor, pero también hay reflexiones, siempre en ese tono desenfadado al que nos tiene acostumbrados, sobre sexo, redes sociales, o clichés sobre los futbolistas, entre muchas otras cosas. Y sí, ya le ha enviado su novela a la reina Letizia.

Primera novela en la calle, ¿qué ha sido lo más difícil?

Empezar, lo más difícil fue empezar porque una vez que empecé, ya no pude parar. Tardé casi 8 años en empezar esta novela. Fui a Santorini y la idea vino nítida, clarísima, pero no sabía cómo ejecutarla. Y luego la vida te lleva, no le das prioridad, lo tienes ahí con un título de Word que ya era este hasta que vino la editorial, me hizo una propuesta, les conté la idea, les encantó. No sabía cómo empezar y me dieron unos tips que me han venido super bien y yo le recomiendo a toda la gente que quiera escribir que haga resúmenes constantemente, como si hicieras sinopsis de una serie.

Una vuelta de tuerca a la comedia de romántica, ¿era una premisa?

Sí, lo que sí que sabía es que iba a ser una comedia y quería que fuera muy disparate porque mi vida también es muy disparate. Tenía claro que quería que la gente se riera, se lo pasase bien y se olvidase de sus problemas mientras leía Soy Afrodita.

“El Jagger tiene más peligro que el novio de Tamara Falcó en un festival de música en mitad del desierto”. Esto nos dice mucho de cuándo has escrito esta novela, ¿no?

Totalmente, antes de casarse. Los referentes con los que yo trabajo día a día tenían que estar presentes en la novela y creo que eso genera complicidad con el lector porque son cosas que todo el mundo conoce y les va a hacer gracia porque la verdad es que la boda de Tamara fue un puntazo.

Mucho sentido del humor, ¿una coraza para hablar de sentimientos sin caer en lo cursi?

Absolutamente, yo me escudo todo el rato en el humor, en las risas y en el sentido del humor. Es mi caparazón. También en la frivolidad que es la mejor terapia que existe. Bastantes problemas hay y bastante chunga está la vida como para no permitirnos echarnos unas risas de vez en cuando. Hasta en el peor de los momentos soy capaz de hacer una broma.

Las relaciones tóxicas, el machismo, la bisexualidad, el colectivo LGTBi, el matrimonio, está todo en la mitología griega.

Una novela que recurre a la mitología griega, llena de salseo, ¿de dónde sale esa inspiración?

Siempre me había atraído la mitología griega, de hecho, recuerdo que mi suegra, que es catedrática de historia y me regaló un diccionario de mitología griega hace muchos años que es un tocho, denso. Cuando estás entre libros, siempre tiro de ensayos para pasar de un libro a otro y voy consultando, a lo mejor me leo un mito, o busco un Dios en concreto. Me iba nutriendo de todo eso y la verdad es que la mitología son temas universales que no pasan nunca de moda. La mitología griega es como un vestido negro, es un fondo de armario, sirve para todo. Las relaciones tóxicas, el machismo, la bisexualidad, el colectivo LGTBi, el matrimonio, está todo en la mitología griega.

Y a veces de una manera más tolerante que ahora.

La verdad es que sí. Dicen que la historia es cíclica. Afrontan temas como la transexualidad, la bisexualidad, la masturbación… sin pudor y hoy en día hay más pudor. Quería recuperar eso con la opción de poder resolver algunas cosas que igual sí que había que revisar a nivel social.

¿Cuándo fue la última vez que te sentiste como una diosa?

Hoy, por ejemplo, me siento como una diosa. Estar aquí y que me hagas una entrevista e interese lo que yo he escrito. Me siento super empoderada por haber escrito esta novela y estar cumpliendo sueños. Hoy en día todos tenemos que buscar nuestro poder interior y permitirnos ejercerlo, que el sistema nos lo pone muy difícil. Al sistema le viene muy bien que nos sintamos pequeñitos porque a los poderosos no les gusta compartir el poder. Pero hay que sacarlo y compartirlo, sin magia, pero todos somos pequeños dioses.

Queda muy reflejado el universo influencer y no sé si quedan en muy buen lugar, ¿te incluyes entre ellos?

Me veo super incluida cuando te tienen que recordar que tienes que subir los stories o metes la gamba. Yo meto la gamba muchas veces. Yo estoy metida en ese universo y quería tratarlo de risa y acercarlo a los lectores que consumen ese contenido para sacar un poco de hierro y desmitificar ese mundo que, al final es gente normal, a veces, luchando por fingir ser más dios de lo que es en realidad y eso es agotador.

Cuando estoy cansada me voy al perfil de Verdeliss y digo, no puedes estar cansada porque si ella hace una maratón al mes, cuidando a ocho hijos, llevando una empresa y está estupenda, tú puedes hacer lo que tengas que hacer hoy.

¿Todos los que salen tienen nombre y apellido en la vida real?

Todos no, algunos están mezclados, algunos son inspiración, alguno es homenaje porque les tengo mucho cariño y están hoy. Otros porque soy fan simplemente y quería que estuvieran.

¿Fan de quién?

Soy muy fan de Dulceida, de Chiara Ferragni, a pesar de sus últimas polémicas. Soy muy fan de Verdeliss, maratoniana, madre de ocho hijos. Cuando estoy cansada me voy al perfil de Verdeliss y digo, no puedes estar cansada porque si ella hace una maratón al mes, cuidando a ocho hijos, llevando una empresa y está estupenda, tú puedes hacer lo que tengas que hacer hoy.

En varias ocasiones haces referencia a prácticas de ética cuestionable que funcionan. Menudo zasca.

Fingir que tu relación es perfecta, querer conseguir algo a cambio de stories y no querer pagar, es un poco hipérbole, un poco exageración llevado a la comedia. No sé lo que hace todo el mundo, pero sí he intentado exagerarlo mucho.

Tenía mucho acné y eso me acomplejaba mucho y me hubiera gustado conocer a Marta Díaz en mi adolescencia.

“Con retoques y filtros cualquiera puede parecer una tía buena”, ¿lo crees de verdad?

Es absolutamente así. Se puede hacer magia con los filtros de Instagram, con los filtros de TikTok, hay gente que es experta en Photoshop y cuando la vea en la vida real dices, ostras, no tiene nada que ver. Gente que oculta sus defectos, que están en su derecho, pero que, como consumidor, cuando ves la realidad dices, igual preferiría verte como eres en realidad porque así yo no me sentiría tan mal. A mí no me ha pasado porque las redes me han pillado crecidita, pero a mí, si me hubiesen pillado de adolescente me hubiera afectado mucho porque yo, por ejemplo, tenía mucho acné y eso me acomplejaba mucho y me hubiera gustado conocer a Marta Díaz en mi adolescencia. Ella habla de su acné, aunque ella usa filtros, unas veces lo esconde y otras veces lo comparte. O ver influencers que te enseñan su celulitis, eso me hubiera venido muy bien en mi adolescencia. Ahora ya lo relativizo mucho.

Creas unos premios para creadores de contenido, ¿poniéndote al nivel de The Gregf con los Premios Esland?

Jajajaja… no los tenía muy en mente. Solo pensaba en qué tendría que pasar si tuviera una agencia de influencers para que mis clientes tuvieran reconocimiento, pues crear mis propios premios y eso es lo que pasa. Además, necesitaba un lugar donde pasase la acción final.

Hablando de redes sociales, se ha convertido en uno de tus medios estrella y has llegado a decir que te dan más dinero que la televisión, pero, ¿si tuvieras que quedarte con uno?

A mí me gusta mucho la televisión. Cuando dije lo del dinero, en ese momento estaba trabajando muy poco en televisión, estaba trabajando más en las redes. Los dos mundos son muy inestables. Un mes puedes facturar más en un mundo y otro, en el otro. Otro mes te puede ir fenomenal y petarlo en los dos y, otro mes, no facturar absolutamente nada. Lo ideal, para mí, es poderlos combinar, que se puede.

Ya que hablamos de televisión, ¿has asimilado ya la salida de Mediaset?

Como yo empecé a asimilarlo antes de que pasara, porque me lo veía venir… tampoco había que ser muy oráculo para verlo. Yo lo que hice fue escapar de todo el ruido a través de la escritura y de las redes sociales. Yo decía, cuando venga, vendrá y estaré preparada y lo viviré con absoluta aceptación y me buscaré otras cosas. Echo de menos con mis compañeros, pero sigo en contacto con ellos.

Ahora tienes un programa de estos de encontrar el amor, ¿te has puesto el cinturón de Afrodita para conseguir finales felices?

Ha sido mucha casualidad. Cuando me proponen hacer Love cost, yo ya estaba escribiendo Afrodita y lo comenté a la productora y se reían. Esto demuestra que el amor es un tema universal tanto en la literatura como en la tele. Ahí estoy haciendo de maestra de ceremonias donde la gente puede encontrar el amor o el dinero.

Clichés con los influencers y también con los futbolistas: caprichosos, irascibles, sexuales y cortitos, ¿pensabas en alguno?

Jajajaja… sí… jajaja. Claudio es una mezcla de varios, pero había uno que me venía a la mente de forma constante, pero creo que la gente que tenga un poquito de noción, tampoco es muy complicado llegar a la conclusión. En seguida verá en cuáles se ha inspirado el personaje. Es un cliché, un estereotipo porque yo también he conocido a deportistas muy inteligentes con mucho fondo. Al final el estereotipo está ahí y tenía que explotarlo, pero con cariño. La naturaleza, cuando reparte si te hace millonario, buen deportista, guapísimo, en algo tienes que fallar, la naturaleza no te lo puede dar todo, y por eso la novela da la opción de que todo el mundo encuentro su camino a pesar de sus defectos.

Quería hablar de los pedos vaginales, quería hablar de la cistitis, de la candidiasis, y lo quería meter porque son cosas de las que no se habla y forman parte del día a día de muchas mujeres.

Hay sexo en la novela y, en varias ocasiones, hablas del pis poscoital, ¿Dra. Marín al acecho?

Jajajaja… esto fue a petición de una amiga mía. Hay que hablar de estas cosas y sí que es verdad que en las películas ves que las parejas, después de tener sexo, se ponen a dormir o se acurrucan y una chica, después de tener sexo, tiene que hacer pis porque si no, luego pasan cosas que son muy incómodas y duelen mucho. Yo quería hablar de los pedos vaginales, quería hablar de la cistitis, de la candidiasis, y lo quería meter porque son cosas de las que no se habla y forman parte del día a día de muchas mujeres. Yo he sufrido de candidiasis toda mi vida y ojalá alguien me hubiese hablado de la candidiasis en algún momento. Infección de orina solo tuve una vez y no fue por tener sexo sino por una operación, qué tristeza.

Reivindicación de no compartir vídeos íntimos sin consentimiento… no sé si eso le viene bien a la prensa del corazón.

Le viene bien porque la prensa del corazón también tiene que tener sus límites. Un vídeo íntimo yo creo que hoy en día no se publicaría, hace años igual así. Hay famosos que se han hecho famosos por un vídeo íntimo, no sé si fue deliberado, creo que en algunas ocasiones sí, pero sí que veo muchas veces en las noticias que hay muchos adolescentes que usan la pornovenganza, el acoso sexual por internet y eso quería que estuviese presente para denunciarlo.

Creo que al machista se le castiga y no se le enseña y creo que hay que hacer uso de la pedagogía y no simplemente señalar.

Del machismo se sale.

Quería reivindicar un poco la opción y el derecho a cambiar y a la segunda oportunidad. Como feminista que me considero creo que hay hombres que todavía no han descubierto el feminismo, no saben lo que es o no lo entienden, que pueden convertirse en grandes aliados si se les enseña. Creo que al machista se le castiga y no se le enseña y creo que hay que hacer uso de la pedagogía y no simplemente señalar.

Siempre he llevado sujetadores con relleno porque me daba vergüenza que se me marcase el pezón y es mi pezón, mi pezón es así.

Basta de relleno para que no se marquen los pezones… qué interés siguen despertando los pezones en una alfombra roja.

Yo tengo mucho complejo de pezón perchero porque yo tengo el pezón siempre completamente erguido, tengo percheros en lugar de pezones. Tengo el pecho muy pequeño, pero se me marca mucho el pezón y eso siempre me ha acomplejado mucho y siempre he llevado sujetadores con relleno porque me daba vergüenza que se me marcase el pezón y es mi pezón, mi pezón es así. Está cambiando, pero todavía queda, porque nosotras mismas es el comentario de tienes frío… eso me da mucha rabia. El pezón se me marca mucho, tengo el pecho muy erguido afortunadamente se me marca mucho y es lo que hay, no pasa nada.

De hecho, llegas a decir que no puedes enseñar tetas, pero sí hate… ¿está descontrolado este tema del hate?

Eso me indigna muchísimo, me indigna que te puedan denunciar una publicación en la que se te vea algo y a veces te sientas un poco desvalido ante el hate porque es libertad de expresión. Yo lidio bien con él, pero he tenido años de pasarlo muy mal con el hate de internet por mi trabajo de televisión. Se pasa muy mal y la gente sabe dónde disparar y según como te pille, duele. Se les olvida que detrás de la pantalla hay una persona. Pero me ha pasado que a veces me han hecho hate, les he contestado y me han pedido disculpas y luego he tenido buen rollo con esa persona anónima.

Eres la reina del salseo, ahora parece que te va más el royal, ¿es más exclusivo?

Me encanta la realeza de siempre. Empecé a consumir contenido royal porque mi madre leía mucha biografía histórica y mucha novela histórica y como vivíamos en un pueblo y no había Fnac, ni El Corte Inglés. Yo leía lo que leía mi madre. Yo con 11 años me leí Viven, que tuve un trauma. Mi madre se leía la biografía de Isabel la Católica y yo también me la leía. Y luego era tema de conversación entre nosotras. Biografía de Ana Bolena, Catalina de Aragón, Juana la Loca… me apasionaba. Empecé a estudiar periodismo y me especialicé en política porque no había opción de especialización en prensa del corazón, pero y me empeñé en demostrar que la prensa del corazón y política va de la mano y mi trabajo de fin de carrera, en la época en la que Felipe estaba mal y cortaba con Eva Sannum porque se veía que no les iban a dejar casarse, e hice: ¿Los asuntos del corazón son un asunto de Estado? Yo ya estaba obsesionada con la realeza, los asuntos del corazón de Felipe, con quién se iba a casar, qué pintaba Aznar opinando de con quién debería casarse Felipe, era como, esto se cotilleo, ¿por qué lo está tratando el presidente del gobierno? ¿qué me estás contando? De ahí vino mi fascinación.

Quiero pensar que Letizia me sigue desde una cuenta secreta. Seguro que me comenta y seguro que le caigo super bien.

Le has enviado la novela a la reina y las infantas, ¿quién crees que la leerá antes?

Letizia. Yo quiero pensar que Letizia me sigue desde una cuenta secreta y que nadie me moleste en mi delirio, es mi delirio y soy libre de delirar lo que yo quiera. Seguro que me comenta y seguro que le caigo super bien. A mí Letizia me cae super bien. Yo voy a tope con ella, me parece fatal lo que le están haciendo últimamente estos medios digitales que, como Casa Real no demanda ni desmiente nada, yo creo que hay muchos que abusan de eso y se publican bulos que, aunque Letizia sea reina, antes que reina es persona y mujer y hay cosas que tienen que doler.

Poco apunte musical. Eros Ramazzotti para una pedida… eso es muy noventero.

Jajajaja… me encanta Eros Ramazzotti, además era super importante porque tiene nombre mitológico. Hay más referencias cinematográficas, soy más cinéfila que musical. Música soy muy limitada, sigo escuchando a Robbie Williams en bucle una y otra vez. Música de los 90, mucho brit pop.

Me atrapa Aitana en este momento en el que intenta hacer esta revolución sexual para que la veamos adulta.

¿El salseo musical no te llama?

Sí, pero tampoco hay mucha cosa. Me gusta seguir lo que viene nuevo. Me encanta Bad Gyal, me encanta su hermana Mushka, me encanta que tenga esa personalidad tan heavy. Admiro a esa gente tan joven que tiene una personalidad tan marcada, que no quiere ir con ninguna discográfica y quiere ser libre, sé que tarde o temprano tendrá que renunciar a esa libertad porque el sistema es lo que es, pero me gusta que intente luchar contra ese sistema. Me gustan estas nuevas generaciones. Me atrapa Aitana en este momento en el que intenta hacer esta revolución sexual para que la veamos adulta de repente, y que tenga que recurrir a eso, igual que Miley Cyrus, para que nos la tomemos en serio y se pueda convertir en una diva. Qué vergüenza que Miley Cyrus haya tenido que liarla parda tantas veces para que le den unos Grammy, es vergonzoso. Miley es una diva y lo es desde hace mucho rato.