Especial
El Día del Padre llega a ‘Supervivientes: Tierra de nadie’ y nos deja momentos muy emotivos y un punto de amargura
También muchas lágrimas de unos padres que echan mucho de menos a sus hijos
Este 19 de marzo se celebra el Día del Padre y en Supervivientes no han querido olvidarse de una fecha tan familiar. Hay cuatro padres en el programa y han recibido mensajes de sus hijos que hemos podido ver en Tierra de Nadie.
Después de llenarse el estómago con la prueba de recompensa en la que pudieron comer espaguetis con albóndigas, tuvieron que seguir comiendo, pero alimentos un poco menos apetecibles. Y tenían que hacerlo si querían recibir una gran sorpresa.
El primero en vivir un momento que tardará en olvidar fue Javier Ungría que, además, acaba de celebrar su cumpleaños.
La hija de Javier Ungría
Javier tiene una hija que dentro de un mes cumplirá cuatro años fruto de su relación con Elena Tablada. “Significa todo, cualquier cosa que hago en la vida desde que ella nació lo hago por ella”. Tiene claro que a Camila le gustaría decirle que “me perdone si en alguna ocasión no he sido el padre que ella se merece, espero que sí y que voy a estar con ella toda la vida y todo lo que necesite y todo lo que haré en la vida será por ella”.
Tenía un sobre con un dibujo de su hija especialmente hecho para celebrar este día que podía ver tras degustar gelatina de anchoa. “Me parece increíble, me tiembla la mano bastante”, decía mientras mostraba el regalo de su hija. No podía evitar las lágrimas de emoción porque, pese a que pensaba que iba a encajarlo mejor llevando solo once días en el concurso, “parece que no”.
También dio las gracias a quien hubiera ayudado a su hija a hacer ese dibujo tan bonito, es decir, a su madre con la que, pese a no mantener muy buena relación con ella, siempre tiene bonitas palabras cuando habla de Elena.
Ahí no terminaban las sorpresas porque también tenía un mensaje de su hija que le hizo llorar más todavía. “Gracias por todo esto. Era mi madre la que estaba por detrás y me decía que me quiere mucho y contaba, que está ahora aprendiendo a contar”, decía sobre lo que había escuchado.
Las hijas de Pedro García Aguado
A Camila no la vimos porque es muy pequeñita, pero a las que sí vimos fueron Natalia y Claudia, las hijas de Pedro García Aguado que hablaron con su padre después de que él se comiera unos testículos de cerdo: “Casi nos haces llorar antes de empezar. Te queremos muchísimo. Estamos muy, muy, muy orgullosas de ti, no te lo puedes imaginar. Lo estás haciendo muy bien papá, de verdad. Eres Dios, eres el mejor, lo estás haciendo super bien, todos estamos super contentos contigo, estamos super orgullosos de ti. Aquí está todo genial, estamos super felices de verte luchar, has luchado toda la vida. Eres un supervivientes de la vida, papá, esto es menos, puedes con todo. Siempre para adelante”.
Sus hijas le pedían que no se olvidara de disfrutar, “lo estás haciendo de la hostia y no tengo palabras para decir lo orgullosas que estamos de ti”.
Destacaron la fuerza de su padre y dejaron claro que los tres juntos son un equipo. Pedro daba las gracias y se quedaba sorprendido de que su hija Claudia, que definió como fría, hubiera hablado desde el corazón. Y a Natalia la definió como un ser de luz. “Son dos mujeres que me hacen la vida mucho mejor”, aseguraba.
El hijo de Mario González
El siguiente era Mario González que, tras degustar unos ojos de vaca, ya empezaba a hablar de su hijo con la voz quebrada y aseguraba que le echaba de menos en esta festividad y todos los días. “Es el motor de mi vida, estoy aquí por él, estoy aquí porque le hice muchas promesas y sigo, cada día, levantándome por él”, decía, esperando que disfrutase y le echase de menos.
Se derrumbaba cuando veía el dibujo que le había hecho su niño, una flor en un cuenco de coco con tres palabras: “Te quiero papá”. Y reconoció que es un artista que con solo 5 años dibuja mejor que él. Imposible no emocionarse viendo cómo escuchaba el mensaje de su hijo que le decía que tenía que ganar.
La hija de Ángel Cristo
El último era Ángel Cristo que, tras tener que probar lengua de vaca y una gelatina de anchoas, escuchaba, entre lágrimas, el mensaje de la hija de su pareja Ana a la que considera como una hija propia. “Ella sabe que yo intento hacer de padre y cuidarla exactamente igual que a mi hija, para mí es ya mi hija y lo va a ser toda la vida y la voy a cuidar siempre exactamente igual que a mi pequeña”, empezaba diciendo.
“Me gustaría decirle a mi hija que es muy pequeña para que entienda lo que nos están haciendo, que son cinco años en los que no le han dejado nunca pasar el Día del Padre conmigo y lo que quiero decirle es que estoy aquí por ella, porque es el amor de mi vida y para volver a estar juntos y que nunca nada ni nadie nos vuelva a separar. Te amo hija”, terminaba diciendo a su hija biológica que, por cuestiones ajenas al programa no ha mandado nada a su padre.
Son muchos los que han lamentado que Ángel no hubiera podido hablar con su hija y ha dejado cierto sabor amargo a este momento tan emotivo para ellos.
Miri y Claudia también podían hablar con sus padres. El de Claudia le pedía que no se enfadara tanto y que se divirtiera y el de Miri le transmitía su orgullo y cariño y le aseguraba que lo estaba haciendo de diez.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...