Una despedida de soltero y un funeral en 'F.G.L.C (A Ratitos), la nueva canción de Álvaro de Luna

¿Es esta la muerte del artista que da paso a una nueva era?

Álvaro de Luna - F.G.L.C. (A Ratitos) - Videoclip Oficial

Parece que Álvaro de Luna ha aprendido lo que es no dar puntada sin hilo. De los últimos lanzamientos musicales del sevillano podemos sacar un montón de conclusiones sobre lo que ha podido pasar en su vida amorosa más reciente sin necesidad de sentarnos a tomar un café con él y que nos cuente la historia de principio a fin, con sus canciones nos basta.

Ahora el artista pone fin (de momento) a la trilogía en la que nos cuenta que los hombres no lloran... o quizá sí. Lo ha hecho con la publicación de F.G.L.C (A Ratitos), su tema más reciente y con el que completa su EP titulado Boyz Don't Cry, en el que también se incluyen Suerte ;) y Desconocidos, canciones que además de destacar por sus estribillos pegajosos, también han sido de lo más comentadas por sus letras.

En esta ocasión, Álvaro de Luna nos presenta nuevamente un tema que le canta al desamor. Casi por sorpresa nos ha regalado una canción en la que narra la historia entre dos personas que, después de un tiempo en que llegaron a compartir todo y ser muy felices, pasan a no querer saber nada más.

Hay veces en las que sabes que una relación ya no va para delante, pero aun así sigues con esa persona pensando que algo llegará y lo arreglará. Mientras tanto, lo único que puedes hacer es escapar, a ratitos, de ella y de la rutina que habíais establecido porque ya no sabes cómo salir de ahí. En resumen, lo que cuenta Álvaro de Luna es el reflejo de cuando estás con alguien que poco a poco va apagándote y haciendo que tu esencia se vaya, hasta tal punto que ya no te reconoces ni a ti mismo.

Álvaro de Luna... ¿matándose a sí mismo?

Esta composición va acompañada de un videoclip en el que Álvaro aparece junto a un grupo de amigos en una limusina, celebrando lo que parece una despedida de soltero. Todos se lo pasan bien, pero cuando llega la mañana el cantante despierta en un lugar desconocido sin saber cómo ha llegado ahí ni hacia donde ir ahora.

El reflejo de la letra queda plasmado a la perfección en unos visuales en los que el sevillano pasa de estar disfrutando a estar perdido en un abrir y cerrar de ojos. Asimismo, vemos que Álvaro comienza a caminar sin rumbo y se topa con un misterioso motorista que sin ningún miramiento aprieta el gatillo y mata al cantante.

Lo más llamativo es que cuando ese motorista que se esconde bajo un casco tupido haciendo que no podamos verle el rostro, después de la muerte de Álvaro deja de lado su anonimato y nos damos cuenta de que es él mismo, pero... ¿en una nueva versión?

Las conclusiones que sacamos de estas letras y de esta especie de película son principalmente que el Álvaro de Luna que conocíamos ya no existe y que, quizá, este sea el modo que ha elegido el artista para dar comienzo a una nueva etapa musical y personal. Sea como fuere, estamos deseando descubrir qué es lo que vendrá después de Boyz Don't Cry.

Andrea Romero

Periodista audiovisual y fan a tiempo completo....