Jon Kortajarena usa prendas de segunda mano: “Nos han hecho creer que algo usado no puede ser especial o sofisticado”
El actor y modelo bilbaíno es un activista medioambiental que persigue la sostenibilidad incluso en su refugio de Lanzarote
Jon Kortajarena apareció el pasado enero en grandes carteles de publicidad ofreciéndose a cualquier medio de comunicación que se animase a lanzar un reportaje de consumo consciente. Fueron muchos los interesados porque al final, es un tema que nos toca de cerca viendo las consecuencias tan evidentes que está dejando el cambio climático en nuestro día a día.
Aquellos carteles formaban parte de una campaña publicitaria del modelo bilbaíno con Wallapop para apoyar la reutilización y la moderación del consumo. De hecho, la ropa que vestía en el reportaje fotográfico era toda adquirida en esta plataforma.
Hemos podido hablar con él sobre esta faceta suya como activista medioambiental. Lleva mucho tiempo preocupado por el planeta y la falta de medidas que se están poniendo en marcha para cambiar las cosas. Se habla mucho de sostenibilidad, algo por lo que aboga Kortajarena.
Moda sostenible. Hace unos años eso nos habría parecido algo imposible, ¿qué ha cambiado?
Ahora estamos viendo los efectos de muchos años de maltrato a nuestro planeta y la situación es muy diferente. Ya nadie duda de los informes científicos sobre el cambio climático; estamos experimentando olas de calor que antes solo eran proyecciones futuras, vemos montañas de plástico en todas las costas remotas y somos conscientes de que es un problema global. Somos testigos de fenómenos meteorológicos mucho más extremos y frecuentes, y todo esto solo empeora. Creo que, a estas alturas, todos somos conscientes de esta realidad a la que nos enfrentamos.
El cambio climático es una causa que ha acaparado especialmente las nuevas generaciones. Lo tuyo es la eterna juventud, ¿no?
Las nuevas generaciones saben que van a vivir las consecuencias de nuestro estilo de vida para el resto de su existencia. Les afecta mucho más que a aquellos que estamos en la mitad de nuestras vidas o que ya la están finalizando.
Sin embargo, el hecho de que quizá yo no vaya a vivir los peores efectos del cambio climático no significa que no me preocupe por las generaciones futuras o por el planeta que tan generosamente me ha dado la posibilidad de existir y vivir en él.
¿Por qué el clima y la naturaleza por encima de otras causas por las que luchar?
Hay tantas causas... La naturaleza es la base de nuestra existencia. Sin ella, no hay nada más por lo que luchar.
La infancia también está entre tus preocupaciones, ¿crees que podrán perdonarnos la herencia que les hemos dejado?
Me temo que se está repitiendo un patrón, que he observado desde mi infancia: la sociedad parece tener una tendencia a permitir abusos contra grupos de todo tipo y con la naturaleza, y mirar para otro lado mientras no nos afecte directamente. Aunque los afectados cambien, parece que la crueldad e inconsciencia humanas son constantes.
Campaña con Wallapop para concienciar sobre el reciclaje también en la ropa, ¿por qué crees que a muchos les cuesta tanto usar prendas usadas?
Creo que es un prejuicio que nos han inculcado para que consumamos aún más. Nos han hecho creer que algo usado no puede ser especial o sofisticado; ahí es donde se introduce el término 'heredado'. Comprar cosas cuando se necesitan está bien, pero debemos intentar adquirir menos productos, aunque de mejor calidad, para que la vida útil del artículo sea más larga y así poder reutilizarlo. Y, por supuesto, debemos exigir por ley el fin de la obsolescencia programada en los electrodomésticos.
¿Cómo alguien como tú que ha pasado su vida incitándonos al consumo a través de sus campañas de moda compagina esa profesión con la necesidad de consumir cada vez menos?
Porque creo que es compatible. En primer lugar, es mucho más sostenible apostar por consumir productos de calidad que consumir de manera constante y sin criterio. Lo que está claro es que debemos dejar de consumir a este ritmo, independientemente de lo que compremos.
A nivel personal, desde que me he concienciado del impacto que tiene la industria de la moda en el mundo, he intentado dar visibilidad a proyectos y marcas que defienden ideas honestas y respetuosas con la naturaleza.
Me gusta hacer todo lo que esté en mi mano para seguir concienciado en esta materia, a pesar de las críticas que pueda recibir. Cuando das pasos hacia una existencia más sostenible y lo compartes en redes sociales para, quizás, inspirar a otras personas, siempre hay gente que critican.
Parece que es mejor no hacer nada que intentarlo, pero no es así. No podemos permitir que estas personas nos quiten las ganas de seguir promoviendo el respeto por nuestro planeta.
Este interés tuyo por la naturaleza te ha llevado a estar en contacto con organizaciones y científicos que se ocupan de estos temas, ¿qué es lo que más te preocupa a día de hoy?
La mentalidad cortoplacista de los políticos que tienen el poder de cambiar las cosas. Tenemos que conseguir que las multinacionales se preocupen mucho más por preservar los recursos naturales, que son en definitiva los usan para enriquecerse ellos, pero son de todos nosotros.
¿Cuál es el dato relacionado con estos temas que más te ha quitado el sueño?
Que consumimos el equivalente de una tarjeta de crédito, en plástico, a la semana. ¿Sabes lo que es eso a lo largo de un año? ¿Y de una vida? Ya han encontrado microplásticos en el corazón de cuerpos humanos y hasta en los huevos de las aves que aún no han nacido.
¿Qué es lo que más te ha costado implantar en tu día a día para apoyar la sostenibilidad?
En el transporte, es casi imposible ser sostenible. Creo que, por ejemplo, las aerolíneas deberían invertir una parte de sus miles de millones de beneficios para compensar el daño que causa su actividad profesional; o debemos fomentar el tren de alta velocidad. En España, la zona norte, como Bilbao, está completamente incomunicada por trenes de alta velocidad. Desde que tenía 20 años se hablaba del AVE Bilbao-Madrid, y todos estos años después, aún no hay ni fecha aproximada de que eso suceda.
Los refugiados climáticos ya existen, ¿crees que, en general, somos conscientes?
Creo que, en esta parte del mundo, la sociedad está diseñada para que no seamos conscientes de casi nada que no nos afecte aquí y ahora. Creo que no somos conscientes de cuánta gente tiene que emigrar porque sus tierras ya están explotadas (muchas veces para abastecer las necesidades de esta parte privilegiada del mundo), están contaminadas (por la actividad de nuestras empresas), o simplemente han desaparecido debido a la subida del nivel del mar. Son muchas personas las que ya están viviendo este drama.
Esta idea del reaprovechamiento, ¿es la que te ha llevado a alquilar tu casa de Lanzarote?
Casa Sua siempre ha sido un espacio que he creado para compartir con mi familia y amigos. Y como no siempre está ocupada, la alquilo en su totalidad o por espacios. Las cosas que no se usan, se rompen, y más frente al mar. También es una oportunidad de compartir algo tan personal como Casa Sua con gente que comparta valores (no hay televisiones, utilizamos placas solares para conseguir agua caliente, fomentamos la compra de productos locales, utilizamos el menos plástico posible, estocadas naturales en el jardín… no es 100% sostenible, pero es algo que tenemos muy en cuenta).
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...