Carey fusiona las raíces mediterráneas con el alma de La Habana en 'Camino al Bembé'

El Mediterráneo y el Caribe jamás estuvieron tan unidos desde que Carey empezó a sonar. Una vez más, el dúo formado por Aarön Sáez (integrante también de Varry Brava) y Antonio Turro, hace de las suyas al fusionar la canción popular latinoamericana que viene de La Habana, con el toque más ibérico posible, haciendo de este un proyecto en el que boleros, danzones, sones y habaneras quieren hacerse hueco en la industria española.

Un año y medio después de lanzar su disco debut, Estamos hablando de tigres, esta pareja musical vuelve para presentar Camino al Bembé, el primer adelanto del que será su segundo álbum, La Casa Rosa. Este nuevo punto de partida rinde tributo a las raíces mediterráneas de Sáez. La canción está inspirada en las travesías de su bisabuelo, marinero que navegaba entre Torrevieja y Santa Pola, pero también cruzaba el charco hasta las tierras latinoamericanas.

La nueva canción de Carey, un puente entre nostalgia y esperanza

De allí se traía un sinfín de historias y melodías que ahora quedan recopiladas en este viaje ancestral que se convierte en el corazón del nuevo trabajo discográfico de Carey. Grabado en los icónicos estudios de Pablo Milanés en La Habana, este nuevo tema profundiza aún más en el sentido de este proyecto musical, ya que los géneros como la habanera o el bolero quedan plasmados desde su lugar originario.

Camino al Bembé es un testimonio de esta cultura caribeña con un toque mediterráneo que evoca tanto la melancolía como la felicidad, tejiendo un puente entre la nostalgia y la esperanza, entre las distancias y el encuentro. De este modo, el bembé es el epicentro de la canción, siendo este una fiesta afrocubana de los orishas, que se ha convertido en un lugar donde bailar y soñar. Así que sí, se podría decir que Carey nos invita a dejarnos llevar por la magia de su música y descubrir qué es lo que hay al otro lado del charco, aunque sin perder de vista nuestras costumbres mediterráneas.