Camila Cabello cuenta el trauma que vivió junto a Lil Nas X en un ascensor: la pesadilla de un claustrofóbico

No hay nada que una más que un trauma. Al menos eso es lo que opina Camila Cabello, quien ha contado en la revista Rolling Stone el horrible momento que vivió junto a Lil Nas X hace unas semanas y que no es apto para claustrofóbicos. Y es que, si los dos artistas se llevaban bien entonces, tras superar ese momento, quedaron unidos para siempre.

No es ningún secreto que Camila Cabello y Lil Nas X se llevan de maravilla. De hecho, fruto de esta amistad, ha nacido la colaboración He Knows para el cuarto álbum de Camila: C, XOXO. Un tema que ha llegado con un videoclip donde se puede ver el buen rollo que hay entre los dos artistas (sobre todo en la escenas falsas que acompañan los créditos).

El trauma que vivieron juntos

Pero esta amistad fue más fuerte todavía cuando se quedaron encerrados en un ascensor. Camila Cabello ha contado a la publicación Rolling Stone lo que les pasó hace unos días a los dos artistas cuando estaban saliendo de la casa de ella para dirigirse al club Heart de West Hollywood para celebrar el lanzamiento de He Knows. ¿Y qué pasó? Pues que el ascensor, con varios miembros del equipo de ambos cantantes, se averió.

"Estuvimos allí encerrados al menos una hora. Fue una locura porque es el ascensor de mi edificio. Lo cojo todos los días y nunca me había pasado lo de aquella noche. Los espejos se empañaron", empieza relatando la artista.

Pero fue la frase de uno de los miembros de seguridad de Lil Nas X quien alarmó a la artista (y eso que lo hizo con buena intención): "El guardia de seguridad de Nas nos dice: 'Hablar lo mínimo posible porque se está empezando a consumir todo el monóxido de carbono y así es como la gente se desmaya'. Nas dijo 'si no estábamos en pánico antes, seguro que lo hacemos ahora'. Fue una locura".

A la hora salieron del ascensor sanos y salvos, tal y como relata Camila. ¿Lo mejor de todo? Que los dos artistas salieron más unidos: "Sin embargo, nos acercó más. Nada como vivir un pequeño trauma". Por supuesto, llegaron a la fiesta y lo dieron todo. Eso sí, lo hicieron una hora más tarde.