'Clancy': Twenty One Pilots cierra la saga que comenzó hace nueve años con 'Blurryface'

Clancy, el séptimo álbum de estudio de Twenty One Pilots ya está aquí. Con él, llega el final de una era que empezó hace casi una década, porque este disco cierra su saga alegórica que dio el pistoletazo de salida en 2015 con Blurryface.

El disco, que incluye géneros tan variados como el new wave, emo rap, hip hop, rock y pop sintético, ha sido compuesto y producido por el propio Tyler Joseph, en colaboración con Paul Meany, socio asiduo de la banda, conocido por participar en otros de sus trabajos. Sus letras abordan experiencias personales y trastornos tan complejos como la ansiedad y la depresión, temas que han estado presentes desde el inicio de la carrera de tøp y que, a su vez, son reflexivas y profundas.

En definitiva, Clancy un proyecto intrigante y emocionalmente cargado que marca el final de una era para Twenty One Pilots. Con su mezcla de géneros, letras profundas y producción meticulosa, demuestra el crecimiento y la madurez de la banda, y deja a los fans esperando con ansias lo que vendrá a continuación.

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El fin de una era, pero no de Twenty One Pilots

Como ya hemos mencionado, esta pentalogía musical se desarrolla en un universo ficticio y metafórico conocido como Trench, concretamente, en la ciudad distópica de Dema. El personaje principal de esta historia es Clancy que actúa como precursor del capítulo final y quien también es protagonista de su quinto álbum de estudio, Trench. En este álbum, se embarca en una aventura para desvelar los oscuros secretos que quedan por resolver.

Que la publicación del disco se haya producido hoy, 24 de mayo, no es casualidad. Porque coincide con la fecha de lanzamiento del cuarto álbum de estudio de la banda, Blurryface, la narrativa que comenzó hace nueve años. Y, aunque Clancy parece el fin de una era, Tyler Joseph aclaró en una entrevista con Zane Lowe que esto no significa que haya terminado de hacer música en general.

"Estoy atrapado. Atascado en un bucle que nunca he sido capaz de romper. Quiero creer que esta será la última vez, pero no lo sé con certeza. Empezaré con lo que hago ahora. Soy ciudadano de una ciudad —bueno, dicen que es antigua pero no hay evidencias, puedo ver cómo mis amigos ponen los ojos en blanco—. Seré breve: soy un ciudadano de Dema, una ciudad circular de cemento en la parte inferior de un continente que, por lo demás, es salvaje y verde, Trench. Tenemos prohibido ir allí. La mayoría ni siquiera lo ha visto, pero yo sí", comienza la introducción.

Soy un fugitivo, uno que mejora cada vez más con cada intento, pero siempre me encuentran. Bueno, él me encuentra... Nico o, como se hace llamar, Blurryface. Es el líder de los Nueve Obispos que gobiernan la ciudad. Su autoridad procede de dos aspectos: un poder milagroso y una religión secuestrada, y uno alimenta al otro. Un bucle. Se llama Valism y lo único que necesitas saber es que enseña que la autodestrucción es la única vía al paraíso. También te permite cómodamente convertirte en una vasija (vessel) disponible para que te utilicen los Obispos. Y ahí es donde aparece el milagro. Lo llamamos apoderamiento. Las normas son que únicamente puedes apoderarte, o controlar, de un cadáver por un corto periodo de tiempo. Y, del mismo modo, ellos (los obispos) son los únicos que pueden hacer esto. Yo soy un ciudadano, soy un fugitivo y soy una excepción de la norma", añade.

Continúa con lo último que ha pasado para situarnos en el presente: "Esto es lo que ha pasado recientemente: Engañé a Nico para que me llevara fuera de los muros, creé una distracción en llamas, escapé. Deambulé, me debilité y me rastrearon, pero esta vez la ruta de seguimiento fue diferente. Los vi, me vigilaban. los Banditos. Leyendas, historias únicas de un grupo que vivía aquí fuera. Poco después de volver dentro de los muros, mi pueblo nuevo me sacó fuera. Me necesitaban para algo: me acogieron, me enseñaron sus colores, pero el bucle era demasiado fuerte. Fui capturado nuevamente dentro (de los muros)".

"Supongo que se extendió el rumor, me volví popular en Dema y a los Obispos no le gustó, pero decidieron usarlo a su favor. Me hicieron un bufón para entretener a la gente, para mentirles y para actuar para ellos. Entonces, traicionaron a Nico... y escapé, otra vez. En esta ocasión, me encontré en un lugar nuevo, arrastrado a una isla y allí recibí un don que creía extinguido. Ahora tenía exactamente el mismo poder milagroso que ejercían desde sus torres. Soy un ciudadano, un fugitivo, una excepción. Vuelvo a Trench y soy Clancy", concluye.