Especial
Marta Riesco carga contra Joaquín Prat y el que era su programa: “Cuidar, cuidaron a Patricia Pardo y Christian Gálvez, a mí me reventaron”
Una entrevista sin filtros donde da su versión de los hechos y admite que sigue en tratamiento psiquiátrico
“Marta Riesco no ha cobrado por esta entrevista. Está en proceso de recuperación. Sigue en tratamiento psicológico y psiquiátrico. Todavía toma medicación. Necesita ayuda y anhela una segunda oportunidad”. Así presentaban en Ni que fuéramos Shhh en su estreno en Ten.
María Patiño y sus compañeros llevaban días cebando esta entrevista que duró más de tres horas y que fueron comentando Belén Esteban, Kiko Hernández, Víctor Sandoval y Lydia Lozano. “Nosotros no la buscamos. Se pone en contacto ella con nosotros a través de una amiga suya, hará como dos semanas”, desvelaba David Valldeperas.
Y a lo largo de más de cuatro horas de programa estuvieron desgranando esa entrevista en la que Marta habló emocionada, asumiendo culpabilidades y hablando sin filtros sobre los que la han decepcionado.
“No quiere saber nada de Antonio David. No ha acabado de procesar el infierno que ha vivido con él. Todavía no se siente preparada para ponerle todas las palabras al horror. Pero necesita empezar a explicar públicamente todo lo sucedido. Sigue culpándose de casi todo. Y mantiene ciertas contradicciones en su relato. Pero hay mucha verdad contrastada en todo lo que cuenta”, eran los titulares que avanzaba el programa.
Su relación con Antonio David
La primera imagen que veíamos de ella nos mostraba a una colaboradora derrumbada, con lágrimas, que aseguraba que Antonio David “es lo peor que me ha pasado en la vida. Ojalá nunca nos hubiésemos cruzado. Creo que ya he pagado un precio muy alto por esta relación y necesito que la gente, también, pase página. He hecho muchas cosas, pero no he hecho nada suficientemente grave para decir, no hay solución”, reivindicaba. Y era solo el principio.
Entonaba el mea culpa en la imagen de rechazo que generó todo aquel escándalo cuando Olga Moreno salió de Supervivientes y se encontró con la relación de su todavía marido con la reportera alegando que no sabía nada. Marta defiende que ya era una pareja rota que solo figuraba de cara a la galería.
En todo momento defendió su relación y se echó a todo el mudo encima. “He sido altiva, he sido condescendiente, he sido creída o lo que se puede pensar que he sido, seguramente, pero estaba rota, estaba en una vorágine donde no sabía qué hacer y cuál era el camino que tenía que escoger y donde tomaba mala decisión tras mala decisión”, admite sobre su actitud en aquel momento.
Sobre aquella época, reconocía que “no fui feliz en ningún momento de esa etapa” y admitía que no entendía nada de lo que estaba sucediendo ni la postura que tomaron tanto Antonio David como Olga.
Contra la productora
Su idilio con Antonio David acabó saliendo a la luz en el programa en el que trabajaba. A partir de ahí, todo se volvió un circo en el que ella salió muy mal parada. Acabó sin trabajo y sin pareja.
“Creo que fue profundamente injusta conmigo la televisión. Evidentemente, yo cometí muchísimos errores. Como persona que estaba siempre detrás de las cámaras, no supe gestionar lo que significaba estar delante. Creo que todo el mundo también se aprovechó de eso. Se tuvo poco cuidado y empatía hacia mí. Así que sí, creo que se me maltrató", expresaba.
En aquel entonces aparentaba una seguridad que no era tal cuando se apagaban las cámaras: “Yo mostraba frente a la cámara una personalidad, pero cuando los focos se apagaban, me iba a los baños a vomitar. Tomaba pastillas para controlar los nervios, no dormía, lloraba todo el rato, no me quería levantar de la cama… Pero, cuando los focos se encendían, pensaba en mi trabajo y en lo que amaba mi profesión".
“Cuidar, cuidaron a Patricia Pardo y Christian Gálvez, a mí me reventaron. Me expusieron al cien por cien. A día de hoy pienso en esa Marta y me da mucha pena. Me falló todo el mundo. Me falló la persona de la que estaba enamorada. Me falló la gente con la que trabajaba, miraron por su audiencia y les daba igual”, dice sin filtros sobre la productora que acabó despidiéndola de manera disciplinaria.
Contra sus compañeros
“Yo no entendía la inquina de Joaquín Prat hacia mí, no la entendía porque yo con él me había llevado super bien. No entendí qué le pasó para ese odio hacia mí. Era, ‘Marta, tienes que entrar en directo’. Y decía Joaquín Prat: 'Marta, qué pasa, ¿qué no tienes neuronas?' Esto lo estaba diciendo en directo y nadie le decía 'oye, ¿puedes hablar con un poco de respeto a esta chica?’", planteaba sobre el que por aquel entonces era su compañero.
No ha dudado en desvelar episodios turbios tras las cámaras de El programa de Ana Rosa. Uno de ellos tenía a Alessandro Lequio como protagonista: “Lequio estaba loco perdido diciéndome de todo. Un programa que se suponía que era blanco. Nivel de decirme si llevaba el chirri depilado en una publicidad y delante de Joaquín. Y yo: ‘¿perdona?’. Y me decía: ‘es que yo solo me acuesto con chicas que no lo tienen depilado. ¿Verdad Joaquín?’. Y la gente se callaba”.
Una entrevista de la que seguro que seguirán hablando en los próximos días porque ha dado mucho de sí.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...