Especial
Lo que Paul McCartney nunca hubiera querido decir: "Consumir LSD me abrió los ojos"
“Realmente yo no quería decir nada. Si el periodista no lo hubiera publicado… es su responsabilidad, no mía”, confesaría después
Cuando el periodista de la revista 'Life' le preguntó directamente, tenía dos opciones: mentir o decir la verdad. El camino más fácil, el que no le causaría ningún problema, era el del engaño. Pero Paul McCartney decidió decir la verdad: "Consumir LSD me abrió los ojos". De los cuatro Beatles fue el último en probar la ‘dietilamida de ácido lisérgico’, pero el primero que lo admitió públicamente. Y la lio parda. Coincidió con su 25º cumpleaños… en junio de 1967
La historia de los Beatles está vinculada estrechamente a todo tipo de drogas (cannabis. cocaína, heroína), pero fue su introducción al LSD lo que tuvo un significativo impacto en su carrera, lo que les cambió para siempre. Los primeros que probaron el ácido fueron George Harrison y John Lennon durante su famosa ‘experiencia dental’ en la primavera de 1965. En una cena en la casa del dentista de Harrison, el anfitrión les puso terrones de azúcar con LSD en el café sin que ellos lo supieran. En Agosto de ese año, en Beverly Hills (California), volvieron a consumir el alucinógeno. Y esta vez se les unió Ringo Starr, pero no McCartney, que decidió rechazar el ‘viaje’. Por poco tiempo. El reticente Paul empezó a coquetear con el LSD el 13 de Diciembre de 1965.
Paul, el último de los Beatles en probar el LSD, fue sin embargo el primero en admitirlo públicamente. Se lo dijo a un reportero de la revista ‘Life’ cuando visitó los estudios de Abbey Road. Casualmente, el grupo ensayaba entonces ‘Lucy in the Sky with Diamonds’. El 16 de Junio de 1967, el medio semanal estadounidense publicó un artículo explosivo en el que Paul McCartney admitía: “Consumir (LSD) me abrió los ojos. Solo utilizamos una décima parte de nuestro cerebro. ¡Piensa en lo que podríamos conseguir si usáramos también esa parte escondida!. Supondría todo un mundo nuevo. Si los políticos tomaran LSD no habría ninguna guerra más, ni pobreza o hambruna”.
El alboroto mediático fue tremendo. Rápidamente, la prensa británica llamó a Paul. Y Paul corroboró: “Mis experiencias con el LSD han hecho de mí una persona mucho más honesta. Ahora encuentro muy difícil decir una mentira”. Lo declaró en el Daily Mirror en su edición del 18 de Junio de 1965. El día que cumplía 25 años. Y dijo más: “He tomado LSD cuatro veces. Me empezó a interesar porque, después de ganar un montón de dinero, de ser famoso, me di cuenta de que había algo más. Había leído un montón sobre el LSD y finalmente decidí probarlo. Fue justo aquí en esta habitación. Cada sesión duró unas seis horas… Una experiencia de la mente, y si quieres, también del alma, fue algo impactante. Simplemente, no lo puedo explicar. Todo lo que puedo decir es que me mostró que hay algo más en la vida, diferente a lo que había experimentado anteriormente, llámalo amor, o Dios, o lo que quieras”.
Ya no había quien pudiera parar el escándalo. Según el libro “The Beatles: Off the Record” (2008), Brian Epstein (que fallecería de sobredosis solo dos meses después) contaba: “Paul me llamó un sábado por la tarde para contarme que había admitido a la prensa que había consumido LSD. Yo estaba muy preocupado. No creo que durmiera esa noche y pensé en ello todo el día siguiente”. Paul apareció en televisión, en la ITN (Independent Television News) el 19 de Junio de 1967. "Mmmm, me preguntaron y la decisión era o mentir o decir la verdad. Decidí decir la verdad... pero realmente yo no quería decir nada. Si el periodista no lo hubiera publicado… pero él quería difundirlo, así que es su responsabilidad, no mía. Solo dije la verdad, no sé por qué todo el mundo está tan enfadado".
“Admito que hay peligro si la tomas”, declaró en otra entrevista en el Mirror. “Pero yo la tomé con un propósito deliberado en mente: encontrar la respuesta a lo que es la vida". McCartney se defendió cuando en un editorial en el Daily Mirror le tildaron de “maldito idiota”. “No lo soy”, dijo. “Y no estoy de acuerdo en que haya influido en los chavales para que tomen LSD. Los jóvenes hacen lo que quieren siempre. Ellos pueden seguirnos y dejarse bigote o ponerse ropas como las nuestras, pero toman sus propias decisiones. ¿Todos los fans de Cliff Richards creen en Dios?. No. Cuando se trata de asuntos personales, todos tomamos nuestras propias decisiones”.
John Lennon opinaba igual. Se lo dijo a su biógrafo Hunter Davies, autor del libro ‘The Beatles’: “Si ellos estaban realmente preocupados, deberían haber sido lo suficientemente responsables como para no publicar esas declaraciones”.
El LSD tuvo un profundo efecto en los Beatles, en sus composiciones y en su imagen pública. La primera canción que se podría mencionar sería ‘Day tripper’, pero con el tiempo sus referencias al ácido fueron menos menos explicitas y más abstractas. Según McCartney su única grabación sobre la experiencia LSD es la psicodélica 'Tomorrow never knows’ del álbum 'Revolver'. En Playboy, en una entrevista de 1984, reveló: “Era una especie de Biblia de la psicodelia. Era una canción LSD. Probablemente la única". Sin embargo, el tema más a menudo asociado con el consumo de LSD es 'Lucy in the Sky with Diamonds', si bien el grupo siempre desmintió que el título fuera una referencia al ácido.
Además del cambio importante en el sonido de su música (‘Revolver’ o ‘Sgt. Pepper’) también varió la opinión que el público tenía de ellos… se transformó su imagen de chicos buenos. Cuando Paul McCartney decidió decir la verdad en lugar de tomar el camino fácil y mentir, convirtió a The Beatles en el enemigo público número uno.
Alicia Sánchez
Periodista en busca de historias chulas del pop