Especial
Probamos la Google Pixel Tablet
Un dispositivo que cumple y que nos pide atención para el futuro.
Google tiene un historial un tanto inusual con sus 'tablets'. En 2019 dijo que dejaría de fabricarlas, pero en 2023 llegó el modelo que nos ocupa. Si, leéis bien, en 2023, pero nos llega ahora con “algo” de retraso. Como sabéis, han pasado bastantes cosas en el mundo entre 2020 y 2023 que pueden haber hecho cambiar el rumbo de su estrategia, pero el regreso de Google a las tablets trae consigo algunas ideas interesantes.
Las Tablets suelen significar entretenimiento y navegación, ya que ofrecen una pantalla más grande sin la necesidad de tener un ordenador portátil o de sobremesa, por un poco más del espacio necesario para un teléfono móvil. Google está intentando darle dinamismo a su ecosistema de aplicaciones e impulsar un mejor uso de las pantallas más grandes con su Pixel Tablet. Eso es algo en lo que Apple ha acertado de lleno con el iPad, que ofrece una experiencia con aplicaciones excelente, que se ejecutan de manera fluida y aprovechan ese espacio extra.
Algunas aplicaciones todavía se abren como si las estuviéramos usando en un teléfono sin utilizar la pantalla completa, todo hay que decirlo, como la aplicación de Facebook, pero todo se andará. Hay una función "experimental" para forzar que las aplicaciones se abran a pantalla completa, pero los resultados no son satisfactorios en todos los casos.
Ese no es el único factor a tener en cuenta al decidir qué Tablet comprar. Esto se debe a que la Pixel Tablet viene con un atractivo comercial único: una base para altavoces. Se trata de una base sobre la que se puede colocar la Tablet cuando no se esté usando, manteniéndola en su lugar de forma magnética, cargándola y mejorando la calidad del sonido gracias a los altavoces integrados.
Básicamente, la base para altavoces convierte a la Tablet de Google en una pantalla inteligente. Esto resuelve el problema de cómo guardar la Tablet cuando no se está usando, y nos permite usar comandos de voz para que haga cosas por nosotros mediante el Asistente de Google. Además, tener los altavoces en su lugar también hace que suene genial, mucho mejor que una Tablet normal, con un sonido más rico para música, YouTube y todo lo demás, aunque no tan bueno como el Amazon Echo Show.
Si nuestro hogar es un ‘Hub’, es decir, lo hemos configurado como un hogar inteligente con Google Home, la Pixel Tablet también actuará como controlador para esos dispositivos. Esa es la estrategia única que Google está publicitando y que explica en parte el precio de 499 euros, ya que esta combinación básicamente nos da las ventajas de un ‘Nest Hub’, pero con una pantalla que nos podemos llevar con nosotros.
Google anunció que se podría comprar la Pixel Tablet sin la base por un precio más accesible, pero al hacerlo, la Tablet entra directamente en competencia con dispositivos más económicos, como el Samsung Galaxy Tab S9 FE. Eso presenta una gran duda a la hora de elegir la Pixel Tablet: su éxito depende mucho de su base con altavoces, pero realmente hay que estar convencidos de que la idea de tener la Tablet a la vista todo el tiempo tenga sentido. Para algunos, será una solución perfecta, para otros, será más difícil de vender.
La Pixel Tablet tiene una pantalla de 10.95 pulgadas con una resolución muy alta de 2560x1600 píxeles, por lo que dispondremos de mucho detalle, lo que la hace ideal para navegar por páginas web o ver la televisión y películas a través de todos los servicios de stream a los que Android nos da acceso. Eso sí, el brillo se queda en los 500 nits, una cifra muy modesta y la frecuencia de refresco en 60Hz, que empiezan a verse algo fuera de lugar cuando el estándar en móvil ha llegado a 120Hz.
En cualquier caso, la experiencia de navegación es excelente, especialmente para los fans de Google Chrome. En lugar de un navegador móvil, obtienes la misma experiencia con pestañas que en un ordenador portátil, lo cual es genial cuando estás viendo las últimas noticias o viendo videos en YouTube.
Sin embargo, en cuanto a fabricación, la Pixel Tablet no es la más premium que se puede conseguir. Está fabricada con plástico, mientras que sus mayores rivales son de metal. A favor diremos que eso la hace un poco más adherente, y también gracias a esto es menos propensa a dañarse. Esto puede hacer que sea mejor elección si hay niños en la casa.
Aunque quizás uno de los mayores 'peros' de este dispositivo descanse en sus entrañas. La Tablet de Google funciona con hardware que se anunció en 2022; esto es un procesador Google Tensor G2 y, si bien eso no afecta a su funcionamiento multimedia básico, es algo que hay que tener en cuenta cuando sabemos que la marca está empezando a dejar atrás el Tensor G3 para sustituirlo por el (a punto de estrenarse) Tensor G4, que será el cerebro de los Pixel 9.
Como con el procesador, Google mantiene una posición 'reservada' para las cámaras; esta Pixel Tablet tiene dos cámaras de 8MP (frontal y posterior) que se aseguran de cumplir con la función comunicativa que se les supone. La compañía entiende que nuestra Pixel Tablet no va a ser nuestro dispositivo fotográfico primario.
Como con los móviles, Google se asegura de que tengamos gadget para rato y asegura cinco años de actualizaciones de software (desde el lanzamiento), y actualizaciones de seguridad hasta 2028, por lo que le queda mucha vida por delante.
La Pixel Tablet es agradable para usar en el día a día, pero no es tecnología de vanguardia y el entorno Android también tiene trabajo por delante para acomodarse a este "gran formato". Lo que la hace única es la base, un accesorio que convierte la tablet en un dispositivo tremendamente versátil y que nos permite utilizarla como punto de encuentro con el Asistente de Google, como un controlador del hogar o como un altavoz inteligente para nuestras necesidades multimedia.
Si Google permanece en el mundo de las tablets (que confiamos en que así sea), esperamos ver la temprana incorporación del Tensor G4 y todas sus capacidades para la implementación de IA en nuestro día a día y eso sí serán palabras mayores. Hasta entonces, esta Pixel Tablet es un dispositivo atractivo y capaz que no defraudara siempre y cuando tengas claras sus limitaciones técnicas.
Pixel Tablet tiene dos opciones de almacenamiento, 128GB o 256GB y puede comprarse con y sin base, por 599 euros y 499 euros respectivamente; aunque, como decimos siempre, la gama Pixel es de las que más movimiento de precios tiene en esos momentos clave del año que nos permiten ahorrar.