Especial
¿Deberían prohibirse los anuncios de coches o de viajes en avión? Esta ciudad ya lo ha hecho
La Haya, en Países Bajos, se convierte en el primer lugar del mundo en el que una ley elimina los anuncios en espacios públicos que promocionen los combustibles fósiles.
Los anuncios de coches están por todas partes. En ellos se plasma la libertad de movimientos, la sensación de empoderamiento de quien los conduce o la felicidad y comodidad que aportan a nuestras vidas. Paradójicamente, nunca muestran otras cosas que van inevitablemente ligadas a su proliferación en las calles, como los atascos o las emisiones de gases contaminantes.
Dada la batalla que buena parte del planeta está librando contra los combustibles fósiles, ¿tiene sentido seguir promocionando productos que los requieren para funcionar? Es la pregunta que se han hecho en el ayuntamiento de La Haya, la tercera ciudad más poblada de los Países Bajos tras Amsterdam y Rotterdam. Y acto seguido han dado con la respuesta: no.
El objetivo de la ciudad neerlandesa es ser climáticamente neutra en 2030
A partir del próximo 2025, esta urbe situada en la costa del mar del Norte se despedirá de la publicidad fósil en espacios públicos. Y eso va más allá de los coches (incluidos los híbridos): afecta también a los anuncios de viajes en avión, de cruceros o de empresas proveedoras de gas.
La decisión, pionera en el mundo, va en la línea con el ambicioso objetivo que se han marcado las autoridades de la ciudad neerlandesa: ser climáticamente neutros de cara al año 2030. Y aunque su aplicación se limita a La Haya, sus promotores instan a otros ayuntamientos del país, así como al Gobierno nacional, a poner en marcha medidas similares. Otras localidades neerlandesas más pequeñas, como Zwolle y Tilburg, también están en proceso de hacer lo mismo.
Los riesgos de una ley pionera
Aunque la ley ya ha sido aprobada, está por ver si la aceptarán de buen grado las todopoderosas empresas afectadas, que podrían recurrirla en los tribunales. En declaraciones al periódico 'Algemeen Dagblad', el concejal de Espacios Exteriores, Bienestar Animal y Medio Ambiente, Robert Barker, ha sido moderadamente optimista al respecto. "Nuestros abogados afirman que esta prohibición es posible”, asegura. "Creemos que los riesgos son limitados. Cuando se hace algo nuevo, siempre hay riesgos. Si nunca quieres mejorar el mundo, no deberías sentarte en una universidad ni en un consejo".
Entre los primeros en aplaudir la decisión están los impulsores de plataformas como World without fossil ads, cuyo objetivo era precisamente eliminar estos anuncios de la vida neerlandesa. Sus responsables han aplaudido el "coraje" de las autoridades locales, y recuerdan que la prohibición de este tipo de publicidad fue una petición del secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres. Sin embargo, no parece fácil en otras latitudes. En España, sin ir más lejos, el Congreso de los Diputados rechazó en 2022 por una amplia mayoría una propuesta de Más País-Verdes Equo para prohibir la publicidad de coches contaminantes.