'Tocotó': Amaia Romero se enfrenta a la presión por la inmediatez reinventando un éxito de Marisol

Después de Nanai, Amaia continúa en la línea de las interjecciones con el lanzamiento de Tocotó, una onomatopeya que hace referencia al galope de los caballos. Y es que, tal y como podemos escuchar en este nuevo sencillo (el segundo del que será su tercer disco), la cantante ha reinventado Corre, corre caballito, el éxito de Marisol.

La pamplonica reflexiona aquí sobre la sociedad de la inmediatez en la que vivimos inmersos y lucha contra ello. Una vida que parece arrollarte y pasarte por encima si frenas un segundo, ya que en la actualidad se mueve a una velocidad vertiginosa. Poniendo el foco en su faceta como artista, parece que si no estás constantemente creando, no existes (ni para los fans, ni para la industria) ni triunfas; si no te adaptas la rueda —que no para de girar—, te quedas atrás.

A lo largo del tema, la autora de Cuando no pasa nada pasa de un sentimiento de preocupación por llegar tarde a todo hasta uno de calma y serenidad, porque al final cada uno tiene su propio ritmo. "Corre, corre, caballito. Ya nos acercamos y ahora que estamos llegando, veo que esto no es ninguna carrera", reza uno de sus estribillos. Amaia lanza un contundente mensaje, especialmente en una profesión en la que se necesitan nuevas aventuras y experiencias que inspiren las canciones que compondrán en un futuro.

Tocotó ha llegado a con un videoclip en vertical donde el scroll infinito que hacemos en redes sociales es el protagonista. Diferentes usuarios corren sobre una cinta en la que se proyecta el feed de Instagram o de Twitter, dos plataformas que, como TikTok, en ocasiones nos engullen y nos hacen perder la noción del tiempo y del espacio. Una crítica que podría haber salido de la mismísima Black Mirror y episodios como Nosedive (Caída en picado), Fifteen Million Merits (15 millones de méritos) o Hated in the Nation (Odiado en la nación).