Ni C. Tangana, ni Quevedo: Este es el artista que podría ser la versión masculina de Rosalía según Marta Salicrú

Marta Salicrú es la directora de la radio de Primavera Sound además de una periodista muy vinculada con la industria musical desde hace muchos años. Y ahora podemos decir que es una de las mujeres que mejor podría entenderse con Rosalía, por lo menos, tendemos claro que utilizarían en mismo lenguaje para expresarse.

Tuvo la oportunidad de conocerla en sus inicios y desde entonces ha sido una de sus máximas seguidoras. Conoce bien su obra y ahora también su vida porque se ha tenido que poner las pilas para escribir un libro en el que recoge el abecedario de la cantante más internacional que tenemos ahora mismo en España.

Rosalía de la A a la Z es un trabajo en el que recoge cien palabras que podrían definir a esta motomami que nos tiene a todos en vilo a la espera de nuevo disco. Su Omega ha sido una píldora para no desesperar mientras llegan sus nuevas canciones.

Y mientras, además, podemos adentrarnos en su universo a través de este libro que nos sirve de manual para entender algunos de los vocablos que hemos ido descubriendo con la vecina más célebre de Sant Esteve Sesrovires y que hemos querido comentar con su autora.

25 de septiembre. Cumple de Rosalía, lanzamiento de Omega. Y lanzamiento de Rosalía. De la A a la Z… Un día de lo más completo, ¿no?

¡Madre mía, Rosalía bajalé! Lo cierto es que hubo un momento bastante avanzado que ya había acabado la redacción de libro que, sabiendo que el libro estaba previsto para septiembre, le dije a mi editora que estaría bien hacerlo cuadrar con el cumpleaños de Rosalía que sería noticia. Y me dijo que la fecha ya estaba decidida y era, precisamente, la de su cumpleaños. Ahí ya hubo una alineación estelar que cuando se estrenó Omega el mismo día, parecía que lo teníamos todo a favor.

Una biografía no autorizada, ¿te ha llegado feedback de la protagonista?

No. Hemos hecho llegar el libro a su equipo, pero está escrito desde la admiración absoluta, con todo el rigor periodístico del cual he sido capaz. De los que sí me ha llegado feedback es de los fans y está siendo muy bien recibido por clubs de fans de España, Argentina y México donde se publicará en febrero. Tener feedback positivo de los fans me hace muy feliz porque una cosa que me daba respeto era que los fans lo saben todo de Rosalía y pensaba que estaba pensado para ellos, pero, ¿les podrá aportar algo? Estoy contenta de que están considerando que sí. Igual la información ya la tenían, pero tenerla presentada de esta manera, cuidada, creo que están detectando que está escrito desde un sitio muy parecido al lugar desde el que su comunidad de fans disfruta de su música. Lo están detectando y lo están apreciando.

100 palabras que nos ayudan a conocerla y definirla… ¿te quedas con ganas de conocer algo más de Rosalía?

Me quedo con muchas ganas de esperar todo lo que venga de Rosalía. Para nada me he quedado saturada después del trabajo, al contrario. No me ha reafirmado porque no me hacía falta, pero tengo muchas ganas de saber por dónde irá. Después de escribir el libro mi impresión es que continuará yendo para sitios distintos con cada disco. Esto no es una casualidad que Los Ángeles fuese tan distinto de El mal querer y este tan distinto de Motomami, mi sensación es que irá para sitios distintos. Que cada vez que ha ido a un sitio, tengo la sensación de que muchas de las personas que la seguimos, en algún momento igual nos hemos quedado un poco desencajados y luego nos hemos dado cuenta de que era el sitio en el que queríamos estar y, por lo tanto, ganas de continuar siguiéndola y que ella maneje y que guíe.

A veces nos tira y a veces nos deja estar en el sitio donde estamos más cómodos y justo en este equilibrio tan preciso está una de las claves de su éxito.

Al hilo de lo que cuentas, ¿te ha desencajado Omega que no te ha dado tiempo de meter en la O?

No, la verdad. Hay artistas que usan los singles entre disco y disco como para ensayar cosas nuevas, igual Rosalía es algo que hizo con Tekeno A palé, pero precisamente Omega es una canción en la que transita por terreno conocido. Líricamente, por el camino que recorrió en Hentai que, además, también es una canción que a pesar de que es más orquestal, también tenía un elemento acústico, no es de las más electrónicas de su catálogo. También me recuerda a Dolerme donde también había este uso parecido de la guitarra. Omega para nada es una canción que me haya desencajado. Además, la colaboración con Ralphie Choo es algo que se esperaba y deseaba desde que ella le dio el impulso y les vimos patinar sobre hielo en Madrid. Es algo que ella hace muy bien. A veces nos tira y a veces nos deja estar en el sitio donde estamos más cómodos y justo en este equilibrio tan preciso está una de las claves de su éxito.

Con todo lo que has leído y las veces que has tenido la oportunidad de compartir tiempo con ella, ¿dirías que hay mucha diferencia entre personaje y persona?

En realidad, hace muchos años que tuve la suerte y oportunidad de compartir tiempo con ella, antes de que publicase Los Ángeles y es cierto que después, durante esa gira y la de El mal querer, tuve la oportunidad de saludarla después de algunos conciertos ay de transmitirle lo feliz que me hacía que su música estuviese llegando a tantas gentes y que su discurso artístico tuviese esta calidad, pero no podría decir que hemos compartido tiempo apenas. Pero la sensación que tengo con estos pocos intercambios que he podido tener con ella y por la calidez con la que vemos que se comporta con los fans, es que es una artista muy agradecida. Es una artista muy inteligente y se demuestra tanto en lo creativo, con en la inteligencia emocional y es esta la que le permite darse cuenta del apoyo que tienen las personas que la siguen y que la acompañan y se comporta de un modo muy agradecido siempre y creo que es sincero y honesto y que no hay nada de artificio en eso. Es muy claro ahí.

Al final es un lenguaje no apto para todas las generaciones. Habrá más de un boomer que piense que es un diccionario en chino.

Me gustaría pensar que les sirve para dar algunas pistas. Es cierto que los mismos textos que sirven como definiciones que están muy impregnados de esta manera de expresarse suya en las canciones, que era algo para intentar usar el mismo código que los fans y usar el mismo lenguaje, igual se queda algo por el camino. Pero creo que puede ayudar para salvar un poco de distancia generacional. Al final, yo soy de una generación distinta a la de Rosalía y la de muchos de sus fans y, al final, ahí estoy con su lenguaje tanto artístico como formal. Tengo ese lenguaje interiorizado, pero ha sido un ejercicio de estilo, ha sido algo muy buscado usar este lenguaje. No me ha causado mucho esfuerzo, pero sí fue muy pensado.

Me da la sensación de que tanto Rosalía como Beyoncé, aparte de que son unas currantas natas y que realmente creen que necesitan trabajar de esta manera para conseguir el nivel artístico altísimo que tienen, también creo que les gusta muchísimo ponerlo en valor.

Algunos dicen que las nuevas generaciones cada vez carecen más de la cultura del esfuerzo. Tú dejas claro en el libro que no es su caso.

Es una de las reflexiones que he estado haciendo con el libro porque creo que ella firmemente cree en la cultura del esfuerzo y es como considera que se tiene que acercar a su trabajo. Es algo que también hace muchísimo Beyoncé, creo que hay un paralelismo muy fuerte entre ellas dos que, además, pertenecen a distintas generaciones. Yo soy de la generación de Beyoncé, somos de la misma edad y me da la sensación de que tanto Rosalía como Beyoncé, aparte de que son unas currantas natas y que realmente creen que necesitan trabajar de esta manera para conseguir el nivel artístico altísimo que tienen, también creo que les gusta muchísimo ponerlo en valor, que nadie piense que su talento es un regalo, que su éxito es algo que les ha venido regalado. Es cierto que contrasta con el discurso de la generación Z, que hay que poner en valor. Me da la sensación de que hay una rebelión contra esto porque la cultura del esfuerzo no te salva en las situaciones de crisis, te las comes igualmente por mucho que te hayas esforzado, y de ahí la rebelión. Pero Rosalía, de momento, no está para nada ahí. Por mucho que publique photo dumps en redes sociales, ella continúa currándose y pensándose mucho todo lo que hace.

Ya que mencionas a Beyoncé, también aparece en tus agradecimientos en los que dices que Dios la bendiga a ella y a otras artistas como Madonna. No sé si con todo escándalo P. Diddy me preguntaba si hubieras quitado su nombre de la lista.

Para mí ella continúa siendo una referencia. No querría tomar conclusiones apresuradas. Para mí continúa siendo alguien importante y me parece importante el hecho de que a pesar de que lleva trabajando desde muy joven, sus obras maestras las ha hecho tras llegar a la madurez como artista y como persona, después de los 35 y cumplidos los 40 y eso me parece, en el contexto de edadismo brutal que vivimos, me parece que es algo muy inspirador, no solo para las mujeres sino para todas las personas. Ahí Beyoncé sigue siendo una inspiración.

Con la L de Libra, un término que suele tener muy presente, ¿es muy de horóscopos?

Es muy millennial lo de usar los horóscopos como sistema de creencias alternativo a las creencias religiosas más tradicionales. Ella en cada uno de sus cumpleaños, pone mucha insistencia en que es libra. En las fotos que hemos visto estaba mucho el símbolo de Libra. Soy una persona muy diletante en lo que respecta al interés por los horóscopos, pero si no lo tengo mal entendido, lo que define de manera más tradicional a las personas libras es su capacidad para seducir y esto es innegable en Rosalía.

Me gustaría pensar que Rosalía será consecuente con su discurso artístico y, no para complacer, vaya a bajar su nivel de expectativas creativas y artísticas para consigo misma.

Se ha convertido como el gran referente de la música española fuera de nuestras fronteras, ¿tiene el listón demasiado alto?

La sensación que tengo por lo que ella ha verbalizado en entrevistas es que su aspiración siempre es en clave artística. La fama, la exposición derivada del éxito que consigue por este nivel artístico siempre es algo consecuencia, no es la finalidad. Por ejemplo, Björk, una artista con la que ha colaborado y que siempre ha dignificado como una de sus referentes, por diversos hechos, pero principalmente por dos, su creatividad totalmente desproveída de una voluntad complaciente, y dos, su dimensión como productora, además de como intérprete y compositora. Björk hemos visto que es una artista que tuvo mucha proyección en un momento dado, tal vez no tan mainstream, pero ha transitado entre un momento de proyección mainstream muy bestia que le llevó incluso a Hollywood, y luego continuar con un discurso creativo que no toda su carrera ha estado en el ojo del huracán y aun así, ha continuado siendo muy interesante. Me gustaría pensar que Rosalía será consecuente con su discurso artístico y, no para complacer, vaya a bajar su nivel de expectativas creativas y artísticas para consigo misma.

Hay muchas palabras que definen a Rosalía y el libro lo deja claro, pero, si tuvieras que quedarte con una, ¿cuál sería?

Diría Libertad porque es una de las que me parece clave y entronca con esto que hablábamos. La libertad que tiene ella cuando aborda su música, tanto mezclando distintos géneros musicales como distintos registros en la parte más literaria que puede transitar por algo muy coloquial y luego evocar un lenguaje más poético en una misma frase y usar un registro cómico, incluso, y luego saltar a otro más trascendente, creo que esta libertad que hemos visto que le ha permitido ir mostrando distintas facetas en sus distintos álbumes es con lo que me quedaría. Ojalá nos vaya demostrando con el paso de los años que sigue ejerciendo esta libertad que la hace tan especial.

Ford T150 Raptor con interior tapizado en rosa, su nombre y la barra de Saoko: Yo manejo, Dios me guía. ¿Diva, choni o qué es eso?

Igual un poco de todo. Son distintas dimensiones que ella nos ha mostrado y que se siente cómoda con todas. Una de los ingredientes de su persona artística es esta cultura hip hop que hemos heredado de finales de los 80 y principios de los 90 en la que hay esta cultura de la fanfarronería y del fardar y ella, por supuesto, está a tope con esto y qué hay más que entronque con esta cultura que llevar un coche tapizado con una de tus barras bordada.

Analizas muchas de sus canciones a través del lenguaje, ¿cuál es la que has escuchado más en bucle?

He ido cambiando. Esto que decía de que a veces Rosalía nos pilla desprevenidas y luego nos damos cuenta de que nos estaba dando lo que queríamos, por ejemplo, A palé es, ahora, una de mis canciones favoritas. Me encanta Bulería también. Pienso en tu mirá, la primera vez que la escuché tuve casi un rapto místico cuando la presentó en Sónar, pero también Despechá es de las que más me sé al pie de la letra.

Muchas de sus palabras las ha aprendido en Latinoamérica, ¿tú has aprendido alguna en este proceso?

Pues sí. Hay veces que estos préstamos del inglés, del spanglish los podemos deducir si sabemos inglés como pimpear, pero cuando Tokischa le dice que hay una fiesta en el kitipó, en Linda, es una palabra que la primera vez que la escuché sentía que tenía que ser algo divertido, que se iban de fiesta, pero no tenía ni idea de a qué se refería. Racineta también la primera vez que la escuché, no la ubicaba para nada que era una chica que se iba de Racing.

Rosalía es una mujer que se ha tenido que desenvolver en un mundo de hombres y no tanto como cantante sino como productora, ¿cómo crees que la ven ellos?

Ella tiene un puesto de liderazgo en su equipo. Una de las anécdotas que cuento en el libro es que su ingeniero de sonido, David Rodríguez, cuando están trabajando en Saoko y Rosalía tenía la intuición de combinar dos géneros a priori tan distantes como el jazz y el reguetón sería algo que podría funcionar, él no lo veía claro. Pero él obedecía porque la que mandaba era ella y, ¿quién tenía razón?

¿Quién dirías que a día de hoy es el Rosalía masculino en España?

Ufff, qué pregunta más difícil. Te diría por proximidad que Ralphie Choo, pero le queda muchísimo camino por delante. Es alguien que digamos que está demostrando una capacidad de llegar al público sin comprometer por ello la creatividad y la experimentación que le sitúa con una manera de entender la música parecida y en sintonía y por eso han trabajado juntos. Pero claro, alguien que tenga la proyección que tiene ella, no lo veo.

Estuvo con C. Tangana y Rauw Alejandro y salieron trabajos con ellos… ¿Habrá película con Jeremy Allan White o han roto demasiado pronto?

Yo no creo que Rosalía, al margen del cameo de Dolor y Gloria, creo que ahora está demasiado centrada en su carrera musical para dedicarse a otras cosas, la verdad. No creo que pueda meterse en cine, pero no por Jeremy Allan White sino porque ella a lo que está es al estudio y, además, porque su visión audiovisual es algo que expresa en sus videoclips y con eso queda totalmente esta dimensión creativa de su personalidad.

¿Cuál es la colaboración de Rosalía que te volaría la cabeza?

En realidad, la que estamos esperando todas sería con Charlie XCX, sería una respuesta muy fácil, podría parecer muy obvio, pero parece que no va a pasar. De momento nos vamos a quedar con las ganas. Pero nos encantaría verla colaborar con alguna otra artista más cercana, ojalá con Bad Gyal que acudió a su fiesta de cumpleaños.