El increíble final de la carta de John Lennon a la reina Isabel II: dentro de un disco y en un mercadillo callejero
Cuando falleció en 1980, su nombre oficial seguía siendo John Winston Ono Lennon MBE. Solo la soberana tenía el poder de revocar el honor
"No puedes evitar quedarte impresionado cuando estás en el palacio, cuando sabes que estás de pie frente a la Reina. Fue como un sueño. Fue precioso". Lo dijo John Lennon recordando el día que recibió de manos de Isabel II su medalla como Miembro de la Orden del Imperio Británico. Sin embargo, se sentía incómodo y aseguró que solo había aceptado porque le convenció el 'todopoderoso' Brian Epstein. La devolvió cuatro años después, junto a una carta explicando por qué lo hacía. Hizo varias copias. Sorprendentemente, una de ellas apareció, medio siglo después, dentro de la funda de un disco adquirido por 10 libras en un mercadillo callejero de segunda mano. Era auténtica. “Un hallazgo increíble”, según los expertos. Su valor excedía las 60.000 libras.
El 26 de Octubre de 1965, los Beatles pasaron a la historia cuando acudieron al Palacio de Buckingham para recibir, de manos de la Reina Isabel II, sendas medallas que les convertía en Miembros de la Orden del Imperio Británico (MBE, siglas en inglés). Los Fab Four, que llegaron al evento en el Rolls-Royce de Lennon, recibían este honor por sus sobresalientes logros en la industria musical. Los cuatro estaban felices, como dijo Ringo Starr según Far Out Magazine: “En principio, ninguno de nosotros tuvo problema alguno. Todos pensábamos que era realmente emocionante”. Y John Lennon recordaba: "Nos reíamos como locos porque acabábamos de fumar un porro… Estábamos muy nerviosos”. Posteriormente, Harrison lo desmintió.
Sin embargo, Lennon no estuvo cómodo aceptando este premio y solo accedió cuando Epstein le convenció. Ya en la rueda de prensa en la que anunciaron que recibirían la distinción, John llegó 70 minutos tarde y, según Anthology, le dijo a un periodista: "Creo que pondré mi medalla en el pulsador del timbre para que la gente tenga que presionarla cada vez que venga a casa... o la llevaré a un anticuario". Pero también reconoció en el mismo libro: "No puedes evitar quedarte impresionado cuando estás en el palacio, cuando sabes que estás de pie frente a la Reina. Fue como un sueño. Fue precioso".
John le llevó la medalla a su adorada tía Mimi, quien la puso en la repisa de la chimenea. Y ahí permaneció hasta 1969. Durante esos cuatro años, John reflexionó mucho y ocurrieron muchas cosas como su 'encamada por la paz' con Yoko Ono por la guerra en Vietnam. Al mismo tiempo, el gobierno británico apoyó al de Nigeria en una guerra civil que llevó al bloqueo de Biafra produciéndose una hambruna (que costó al menos un millón de vidas) y un sangriento conflicto que se intensificó en el verano de 1969 y estimuló una gran movilización mundial.
El 25 de Noviembre de 1969, el creador de ‘Give peace a chance’ decidió desplazarse al bungalow de su tía Mimi (una propiedad que él mismo le había comprado en la hoy exclusiva península de Sandbanks, Bournemouth) y cogió la medalla MBE de la repisa de la chimenea. Ya en sus oficinas de Apple, en Savile Row, Londres, escribió una carta y sus correspondientes copias. Una fue para la Reina Isabel, otra para el Primer Ministro Harold Wilson y la tercera para la secretaria de Cancillería Central (responsable de la administración de las órdenes de caballería y honores en general).
El chófer de Lennon, Les Anthony, llevó personalmente la medalla a Buckingham Palace junto a una carta, escrita a máquina, en un folio con el membrete de ‘Bag Productions’, la nueva compañía de Lennon y Yoko.
“Su Majestad: Estoy devolviendo este MBE como protesta contra la implicación de Gran Bretaña en el asunto Nigeria-Biafra, contra nuestro apoyo a América en Vietnam y en contra del descenso en listas de 'Cold Turkey'. John Lennon de Bag”. Solo el encabezamiento (‘Yours Majesty’) y la firma (With Love Johnlennon) estaban escrito a mano. Al parecer, Su Majestad nunca respondió esa carta. El cantante solo se arrepintió de una cosa. Le pareció frívola su mención de ‘Cold Turkey’, su single con la Plastic Ono Band que lo más alto que llegó en las listas de Estados Unidos fue al nº 30 y en Reino Unido alcanzó el puesto nº 14.
Nunca se supo qué habría sido de esa medalla hasta 2009, cuando apareció en un almacén de la Cancilleria Central en el Palacio de St James. 40 años después de que fuera devuelta. En su caja original, junto a la carta que causó un gran terremoto mediático.
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El hallazgo en el ‘almacén real’, era, hasta cierto punto, algo normal. Lo totalmente insólito fue lo que descubrió un hombre dentro de la funda de un disco de vinilo de 45 rpm. El 27 de Octubre de 2016, todos los medios británicos publicaban la noticia. Lo que encontró ese hombre - que quiso mantenerse en el anonimato - fue la carta que John Lennon había escrito a Isabel II en 1969. No la original, pero sí una de las copias. El individuo había comprado el disco 20 años antes en un mercadillo callejero, como parte de una colección de objetos usados por la que desembolsó 10 libras. Desde entonces, lo había tenido en su buhardilla.
El propietario llevó la carta a Liverpool, coincidiendo con un día especial de memorabilia en la exposición ‘The Beatles Story’. El experto Darren Julien (Julien's Auctions) declaró en BBC que era “un hallazgo increíble” cuyo valor podría superar las 60.000 libras. La escritura de Lennon fue confirmada por tres expertos y la carta era original. No la que envió a la Reina (que permanece en los archivos reales), pero sí una de las copias que elaboró el propio John. Se cree que no la envió porque se corrió la tinta.
David Bowie, Brian Eno o Paul Weller rechazaron ser nombrados Caballeros del Imperio Británico. John Lennon, sin embargo, sí aceptó. Y, aunque devolvió la medalla, cuando falleció en 1980, su nombre oficial seguía siendo John Winston Ono Lennon MBE. Solo la Reina tenía el poder de revocar el honor.
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Alicia Sánchez
Periodista en busca de historias chulas del pop