David Brocano dedica su último premio a ‘El Hormiguero’ (y no, no va con ironía)

Es un hecho que David Broncano se ha convertido en la verdadera estrella de la presente temporada televisiva. Con la llegada de La Revuelta a La 1 y su clarísima victoria sobre El Hormiguero, el presentador se ha ganado el cariño del público y también el reconocimiento de la crítica. Esta misma semana, sin ir más lejos, ha ganado el Premio Iris a Mejor presentador de entretenimiento, un galardón que, sorprendentemente, se lo ha dedicado a su rival más directo.

En esta categoría, Broncano competía directamente con Carlos Sobera (First Dates), Chenoa (Operación triunfo), Eva González (La Voz), Pablo Motos (El Hormiguero) y Ramón García (Grand Prix). El presentador de La Revuelta se llevó el gato al agua en la gala que organiza la Academia de la Televisión y aprovechó esta estupenda ocasión para darle las gracias al formato de Antena 3. Y ojo, porque en su discurso no había ni una gota de ironía.

“Quería agradecer el premio a El Hormiguero. No es irónico, os juro que no es irónico. Sé que hago muchas bromas con ellos, pero no es irónico”, empezó diciendo el cómico. “Esto lo dicen los deportistas: tener un rival duro te hace jugar mejor. Aquí nos ha pasado. El mayor cruce de audiencia era con El Hormiguero. Si no hubiésemos tenido enfrente semejante trasatlántico televisivo, no nos hubiéramos puesto tanto las pilas”.

‘La Revuelta’, imparable

En los últimos meses, La Revuelta ha conseguido lo que parecía imposible. No solo se ha hecho un hueco en el access prime time, la franja mas competitiva de todas, sino que ha liderado por encima de El Hormiguero casi todas las noches. Este martes, por ejemplo, La Revuelta fue el espacio de entretenimiento más visto del día después de anotar un 15,7% de share y reunir frente al televisor a 2.084.000 espectadores.

No obstante, el espacio presentado por Pablo Motos se ha mantenido en unos índices de audiencia muy sólidos, por lo que esta competencia entre La Revuelta y El Hormiguero solo ha hecho que la televisión salga ganando, atrayendo a nuevos públicos que se habían alejado de la pequeña pantalla.