La frase de Duki con la que cuestiona su felicidad: “No estoy a gusto conmigo”
El artista argentino se sincera en su última entrevista
Duki posa para la revista GQ / Adrián Ríos
Parece que el lanzamiento del último disco de Duki fue hace mucho tiempo. Sin embargo, la estrella argentina sigue promocionando Ameri cada vez que tiene ocasión. La última entrevista la ha concedido a la revista GQ Hype y aquí, además de hablar largo y tendido del álbum, también se ha sincerado sobre cómo se siente.
Tendemos a pensar que los artistas que encabezan las listas de éxitos son felices. Tienen fama, poder y millones de fans. Sin embargo, Duki siempre ha sido sincero a la hora de mostrar sus sentimientos y no ha dudado en hacerlo también esta vez. “He alcanzado el éxito. ¿Estoy a gusto conmigo? Creo que todavía no, que con Ameri no alcancé mi Ameri”, afirma.
Duki posa para la revista GQ / Adrián Ríos
Duki posa para la revista GQ / Adrián Ríos
Además, Duki está harto de que, por el hecho de ser rapero, no pueda exteriorizar cómo se siente. “Sigue existiendo el estigma de que los raperos tienen que ser súper gángster y duros todo el tiempo”, se queja. “Hablar de que me siento mal o de que tengo una pelea interna no me hace más débil, todo lo contrario. Por eso hablo de mis vulnerabilidades, las trato y las muestro”.
El cambio radical de Duki
Duki lleva mucho tiempo formando parte de la industria musical. Estuvo años y años sin parar, trabajando para llegar a lo más alto. Esa vida le hizo adquirir unos malos hábitos con los que rompió cuando llegó el 2020. La pandemia, en cierta medida, lo salvó. “Desde 2017 nunca había dejado de girar, no terminaba de estar solo en casa y tranquilo. Encontrarme de nuevo conmigo y verme en un espejo y no reconocerme hizo que me preguntara en qué momento había pasado todo esto”, desvela el artista.
En ese momento, Duki hizo un examen de conciencia. Se alejó de lo malo y se dio cuenta de todas las cosas buenas que tenía a su alrededor: “Me quise alejar de las drogas, quise cambiar de compañía... Ahí empezó toda esta reestructuración. Entendí de verdad lo bueno que mi familia hacía por mí cuando yo lo necesitaba y que hasta entonces no había visto, situaciones por las que chocábamos y ellos sufrían”.
