Suecia en Eurovisión 2025: el mal perder de Måns Zelmerlöw y la suerte de un país ganador

Reñida y polémica. Así podríamos definir la elección de la candidatura oficial de Suecia al festival de Eurovisión 2025. Reñida porque apenas un puñado de votos ha separado la canción ganadora, Bara bada bastu de KAJ, de la subcampeona Revolution de Mans Zelmerlow. Pero lo que nadie esperaba iba a ser la reacción del antiguo ganador del certamen al quedarse fuera del evento de Basilea: «Ya veremos en mayo si el jurado internacional tomó la decisión correcta». Unas palabras expresadas durante una entrevista a Expressen que inmediatamente han dado la vuelta al mundo y han convertido una noche de fiesta y alegría para la delegación sueca en un motivo de polémica. Porque no han faltado las críticas al intérprete sueco por tomarse tan mal la derrota en el concurso de selección y sobre todo porque no desprendía ningún tipo de apoyo a la canción de su país. Viendo la ola de odio que se le ha venido encima, Mans Zelmerlow no ha tenido otro remedio que recoger cable y mostrar otra cara. Lo ha hecho a través de sus redes sociales con un mensaje de felicitación a los ganadores a los que les desea el máximo de los éxitos, algo que probablemente fue lo que debió hacer nada más terminar el show. «Estoy realmente SUPER FELIZ por KAJ y nos hemos divertido mucho juntos en este viaje. Yo personalmente los he felicitado varias veces y NUNCA he devaluado sus contribuciones, al contrario! ¡Nos harán sentir orgullosos en Basilea! (...). Una y otra vez. ¡Una gran felicitación a KAJ! ¡Amo a Kevin, Axel y Jacob! Y a todos ustedes NO haters - ¡un agradecimiento fenomenalmente grande por todos los votos y todo el apoyo durante este viaje! ❤️❤️❤️» escribió el artista. Las palabras de Zelmerlow en el perfil oficial de Instagram no han apagado un incendio que aún continúa en los principales foros de discusión sobre esa excesiva competitividad mostrada por el artista. Otros, sin embargo, entienden que eso es precisamente lo que ha hecho grande a Suecia en el festival. Suecia ha demostrado ser una potencia en el Festival de la Canción de Eurovisión, consolidándose como uno de los países más exitosos en la historia del certamen. Desde su debut en 1958, Suecia ha ganado el concurso en siete ocasiones, empatando con Irlanda como el país con más victorias. El éxito de Suecia en Eurovisión no es casualidad. El país cuenta con una sólida tradición musical y un sistema de selección nacional, el Melodifestivalen, que es casi tan popular como el propio festival. Este concurso interno permite a Suecia presentar siempre a los mejores artistas y canciones, asegurando actuaciones de alta calidad año tras año. La primera victoria sueca llegó en 1974 con el icónico grupo ABBA y su canción Waterloo. Este triunfo no solo catapultó al cuarteto a la fama mundial, sino que también marcó un hito en la historia del festival. Waterloo fue elegida como la mejor canción en la historia de Eurovisión. En 1984, Suecia volvió a alzarse con el trofeo gracias a Herreys y su canción Diggi-Loo Diggi-Ley. Este trío de hermanos conquistó al público y apenas unos años después Carola repetiría en 1991 con su poderosa interpretación de Fångad av en stormvind. Carola, una de las artistas más queridas de Suecia, ya había participado en Eurovisión en 1983, donde quedó en tercer lugar. Su triunfo en 1991 consolidó su estatus como una de las grandes estrellas del festival. En 1999, Charlotte Nilsson (ahora conocida como Charlotte Perrelli) llevó a Suecia a la victoria con Take Me to Your Heaven. Esta canción, con su estilo pop clásico, encantó tanto a los jurados como al público, asegurando la cuarta victoria para el país. Después de una pausa de más de una década, Suecia volvió a brillar en 2012 con Loreen y su inolvidable Euphoria. Esta canción no solo ganó el festival, sino que también se convirtió en un éxito internacional, alcanzando los primeros puestos en las listas de varios países europeos. Y una década después la intérprete sueca repetiría triunfo con Tattoo convirtiéndose en una de las pocas artistas que ha logrado el triunfo en dos ocasiones. Antes, en 2015, Måns Zelmerlöw logró la sexta victoria para Suecia con Heroes. Su innovadora actuación, que combinaba música y efectos visuales, fue un éxito rotundo y demostró una vez más la capacidad de Suecia para innovar y sorprender en el escenario de Eurovisión aunque no estuvo exento de polémica debido a las acusaciones de plagio que recayeron sobre él por las similitudes con una canción de David Guetta. KAJ es un trío sueco-finlandés formado por Kevin Holmström, Axel Åhman y Jakob Norrgård. Fundado en 2009 tomando las iniciales de cada uno de sus nombres, el grupo tiene un estilo musical muy definido apostando por el tecno humorístico en un dialecto a caballo entre el finés y el sueco llamado Vöyr. El grupo lanzó su primera canción, Heimani i Skick, en 2012, seguido de su primer álbum, Professionella Pjasalappa, en 2013. Sin embargo, fue con su segundo sencillo, Jåo nåo e ja jåo YOLO ja nåo, lanzado en 2014, que alcanzaron la fama, siendo elegida como Canción del Año en las radios de habla sueca en Finlandia. KAJ ha demostrado ser un grupo polifacético, participando en musicales y programas de radio. En 2018, protagonizaron un musical de gran éxito en el teatro Wasa, agotando todas las entradas en sus 24 funciones. Celebraron su décimo aniversario en 2020 con un concierto televisado y el lanzamiento de un álbum en vivo. 2025 marcará un año de inflexión para ellos con su participación en Eurovisión. Es la primera vez en los últimos 27 años que Suecia manda al festival una canción en su idioma.

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La polémica estalla en la candidatura de la gran favorita a Eurovisión: Bara Bada Bastu de KAJ

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