¿Qué son las superbacterias? Todo sobre los villanos invisibles que están ganando la batalla
Te explicamos el peligro que suponen estos organismos de los que, probablemente, cada vez escucharemos hablar más a menudo.

Las superbacterias suponen una seria amenaza de salud pública. / peshkov
Por si no teníamos suficiente con la crisis climática, el inquietante avance de la inteligencia artificial y presidentes de potencias mundiales que toman decisiones críticas en base a por dónde les pegue el aire, existe otro enemigo silencioso acechando: las superbacterias. Una amenaza real, pese a su tamaño microscópico. Y más peligrosas de lo que parecen. Porque no están en un laboratorio secreto en algún país remoto: están aquí, ahora mismo, en hospitales, granjas… y posiblemente en tu cocina.
Es probable que hayas oído hablar de ellas. Y, de hecho, es más que esperable que cada vez estén más presentes en las noticias. Pero, ¿qué son exactamente? A grandes rasgos, se trata de bacterias que han desarrollado resistencia a varios antibióticos. Dicho de otra manera: organismos que han aprendido a esquivar las balas con las que intentábamos matarlas.

El abuso de antibióticos está detrás de la proliferación de superbacterias. / Fahroni

El abuso de antibióticos está detrás de la proliferación de superbacterias. / Fahroni
El problema no es nuevo. Desde que Alexander Fleming descubrió la penicilina en 1928, los antibióticos han sido el arma más poderosa de la medicina moderna. Han salvado millones de vidas, permitiendo desde operaciones completas hasta partos sin que la gente muera por una simple infección. Pero, como pasa con muchas otras herramientas, su uso desmedido nos ha llevado a un callejón sin salida.
De lo micro a lo macro
Durante décadas, hemos abusado de los antibióticos. En hospitales, sí, pero también en la ganadería industrial (donde se usan para que los animales crezcan más rápido y evitar enfermedades en espacios masificados). Incluso nosotros, los ciudadanos de a pie, tenemos parte de responsabilidad: ¿quién no ha dejado una caja de antibióticos a la mitad porque "ya me siento mejor"? Ese mal hábito, multiplicado por millones de personas, ha hecho que las bacterias evolucionen más rápido que nuestras soluciones.
La OMS ha avisado: estamos entrando en una era post-antibióticos
El resultado: cada vez hay más infecciones que no responden a ningún tratamiento conocido. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ya lo ha dicho sin rodeos: estamos entrando en una era post-antibióticos. En 2019, las infecciones por bacterias resistentes mataron directamente a 1,2 millones de personas en el mundo. Para 2050, podrían ser más de 10 millones al año. Para ponerlo en perspectiva: más que el cáncer.
Y no hablamos sólo de enfermedades raras. Cualquier operación de apendicitis, cualquier neumonía o una simple herida infectada puede convertirse en un problema sin solución. Las bacterias resistentes están por todas partes. Y lo más alarmante es que muchas veces no nos enteramos… hasta que es demasiado tarde.
Tenemos que usar los antibióticos sólo cuando realmente hacen falta
Entonces, ¿qué hacemos? Primero, dejar de repartir antibióticos como si fueran caramelos. Necesitamos usarlos sólo cuando realmente hacen falta, y siempre con prescripción médica. Segundo, invertir (y mucho) en investigación: necesitamos nuevos antibióticos, nuevos tratamientos, nuevas estrategias. Y tercero: tomar conciencia de que esta lucha no es solo de médicos y científicos. Es de todos.
Porque sí: puede que las superbacterias no salgan en los titulares tan a menudo como otros temas, pero están ahí. Invisibles. Letales. Y más inteligentes y escurridizas de lo que pensamos. Ahora que lo sabes, la próxima vez que alguien diga "no pasa nada por tomarme este antibiótico por si acaso", quizá puedas ser tú quien le explique por qué sí pasa. Porque en esta historia, el final todavía no está escrito. Y, por una vez, podemos ser nosotros los que tengamos la última palabra.