Jared Leto arranca el show de Thirty Seconds to Mars lanzándose por una tirolina
El actor y cantante ofreció al público español una actuación antológica

Lo de anoche en Marenostrum Fuengirola no fue solo un concierto, fue una experiencia cinematográfica. Jared Leto, líder de Thirty Seconds to Mars, sorprendió al público con una entrada antológica: descendiendo en tirolina desde las alturas del Castillo Sohail hasta el escenario principal Unicaja, ante miles de fans boquiabiertos que ya sabían que estaban a punto de vivir algo histórico.

“¡Hola Fuengirola!”, gritó el actor y músico antes de lanzarse desde la fortaleza milenaria. Y lo que vino después fue una auténtica descarga de adrenalina, luz y conexión emocional. La banda californiana, conocida por su potente puesta en escena, firmó una actuación inolvidable donde no faltaron clásicos como Kings and Queens, This Is War, The Kill (Bury Me) o Closer to the Edge, coreados a pleno pulmón por un público completamente entregado.
Con el mar Mediterráneo de fondo y el castillo iluminado como si de un set de rodaje se tratase, Leto se paseó por el escenario, bajó al foso para cantar entre sus fans y se fundió con ellos en más de una ocasión, fiel a ese estilo cercano y enérgico que lo ha convertido en uno de los frontmen más carismáticos del rock alternativo.
LOS40 Classic
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El show, repleto de luces, humo y efectos visuales de primer nivel, confirmó el idilio entre Thirty Seconds to Mars y su audiencia española. “Gracias, gracias y gracias. ¿Estáis preparados? ¡Vamos a darlo todo!”, exclamó el vocalista tras la segunda canción, marcando el tono de una noche mágica que quedará grabada en la historia de Marenostrum.
Un festival con alma verde
Marenostrum Fuengirola no solo brilla por su cartel, que este verano incluye nombres como Ricky Martin, Maná, The Corrs o Tom Odell, sino también por su fuerte compromiso medioambiental. En 2024 se convirtió en el primer ciclo de conciertos en España en medir, mitigar y compensar todas sus emisiones de CO₂, recibiendo la prestigiosa Certificación de la Huella de Carbono de AENOR. Una distinción que consolida al festival como pionero en sostenibilidad dentro de la industria musical europea.












