Tame Impala celebra diez años del álbum de las billones de reproducciones, 'Currents', con un nuevo disco

Hay discos que se olvidan. Otros, que resisten. Currents, en cambio, trasciende el tiempo. Tras diez años de su lanzamiento, la obra de Tame Impala continúa expandiendo su influencia y desafiando los límites de la música en el siglo XXI. Lanzado el 17 de julio de 2015, Currents no fue simplemente un álbum; fue un acto de fe radical en el cambio.

Kevin Parker, en ese momento ya considerado un genio del neo-psicodelismo, decidió deshacerse de su zona de confort y sumergirse en un universo sonoro cargado de sintetizadores, ritmos electrónicos, R&B ambiental y confesiones emocionales. Lo que podría haber sido un salto al vacío terminó convirtiéndose en un clásico instantáneo.

En sus propias palabras, Parker ha recordado en su perfil de Instagram lo mucho que le costó dar vida al disco: "Tuve más de una crisis existencial durante la grabación y el lanzamiento... No sabía si era genial o vergonzosamente malo", confesó. Pero como todo visionario, supo seguir adelante incluso cuando dudaba: "Sabía que era un disco qué tenía que hacer".

Parker tradujo emociones complejas en estructuras pop con una habilidad melódica inigualable. Hizo de la vulnerabilidad algo rítmico y cósmico. Esa paradoja —música expansiva que habla de la duda y el replanteamiento personal— es una de las razones por las que Currents ha calado tan hondo en distintas generaciones.

Su legado va más allá de las cifras —que, por cierto, son astronómicas: miles de millones de reproducciones anuales, éxitos multiplatino, y presencia constante en las listas de "lo mejor de la década"—. Su verdadero impacto se mide en los artistas que inspiró, en los géneros que ayudó a redibujar y en el modo en que moldeó el gusto musical de los que quieren hacer música.

Las señales del nuevo álbum

Diez años después, Parker no solo conmemora el pasado: también insinúa el futuro. Todo comenzó hace un mes, cuando, tras su show en el Primavera Sound, ofreció un DJ set sorpresa en Barcelona. Allí, frente a un público expectante, dijo: "¿Quieren escuchar una nueva canción de Tame Impala? Serán los primeros en escucharla, no hay vuelta atrás".

Desde entonces, las pistas han ido apareciendo. Hace apenas unos días, Parker compartió en Instagram un carrusel de imágenes con el pie de foto "He estado ocupado". En ellas, se lo ve en sesiones de estudio, tocando al aire libre, en grabaciones de video y junto a su esposa Sophie Lawrence, quien está embarazada. La última imagen del post encendió todas las alertas: una pizarra con múltiples pistas marcadas como "terminadas".

Además, los suscriptores a su newsletter recibieron un misterioso mensaje: "¿Debería esperar hasta el final del verano?", acompañado de la imagen del supuesto nuevo álbum, que sería el primero desde The Slow Rush en 2020.

Las reacciones no se han hecho esperar. Artistas como SZA, Dua Lipa y A$AP Rocky comentaron con entusiasmo, felicitando a Parker por la nueva etapa personal y mostrando impaciencia por el regreso de Tame Impala.

Todo indica que Kevin Parker se encuentra en pleno proceso de renacimiento creativo. A diez años de su obra maestra más decisiva, Tame Impala vuelve a latir con fuerza. El futuro, como su música, está lleno de posibilidades.