ROSALÍA anuncia su gira 'LUX Tour'. Fechas, ciudades, entradas y más

Katy Perry demuestra en Madrid que sus éxitos son atemporales, en este plano astral y en cualquier distopía o multiverso

La artista dio circo del sol, dio baile y dio espectáculo en el Movistar Arena durante algo más de dos horas

Katy Perry, en concierto en el Movistar Arena de Madrid, 11 de noviembre de 2025. / Mariano Regidor

Ayer martes, 11 de noviembre, Katy Perry aterrizó en el Movistar Arena de Madrid con 'The Lifetimes Tour' para ofrecer el último concierto de su gira europea (el número 83), pero también, el primero de toda su carrera en la capital —con gira propia, porque cabe recordar que actuó en plena Puerta de Alcalá de la mano de los EMAs 2010—.

La artista, que durante esta etapa ha contado con Becky Hill como telonera, comenzó su show puntual. A las 20:55h, las luces del recinto se apagaban para transportarnos a un mundo de realidad virtual, una distopía futurista que tenía como banda sonora los mayores éxitos de la anfitriona.

Después de una breve introducción a través de los visuales, Katy Perry ascendió a los cielos del Movistar Arena desde el centro de un escenario central en forma de infinito como si de una androide se tratara —casi recién salida de Guardianes de la Galaxia—, para interpretar Artifical, Chained to the Rhythm, Teary Eyes y Dark Horse. Aquello era solo el principio, porque la estadounidense estaría más suspendida en el aire que sobre la tarima; y si parpadeabas, te lo perdías.

Uno de los platos fuertes de la velada vendría a continuación durante Woman's World, un bloque protagonizado por esta canción, así como éxitos atemporales como California Gurls, Teenage Dream, Hot n Cold, Last Friday Night o un pequeño fragmento de Peacock.

En este segundo acto, además, quiso presentarse ante su público en Madrid para reconocer que había "sido estúpida" al no haber visitado "la mejor ciudad del mundo" con ninguno de sus tours a lo largo de su trayectoria.

Del mismo modo, quiso trasladar la fiesta de Chueca —sí, aprendió dónde está el ambiente de la capital— a la avenida de Felipe II, dedicando I Kissed A Girl su canción más LGTBIQ+ a todo el colectivo. Todo ello, con tantas acrobacias, piruetas, carreras por el escenario que, por un momento, todos los presentes pensábamos que estábamos en el mismísimo Cirque Du Soleil, pero mucho más divertido.

Katy Perry en concierto en el Movistar Arena de Madrid, 11 de noviembre de 2025. / Mariano Regidor

A lo largo de las casi dos horas y cuarto que duró el espectáculo, Perry nos llevó al Nirvana, enfrentándonos a universos tan ficticios como los Blade Runner, Matrix y hasta la Guerra de las Galaxias, con temas como Crush; I'm His, He's Mine; o Wide Awake.

Otro de los momentos más especiales y esperados por el público llegó durante el set dedicado a los KatyCats de verdad, los de siempre. En el bloque Choose Your Own Adventure, los fans eligen una canción sorpresa a través de un QR proyectado en las pantallas y la intérprete selecciona un par de seguidores para subir al escenario.

La seleccionada fue By The Grace of God, pero, tras un pequeño debate entre los asistentes, decidió cantar la mencionada, además de Unconditionally y The One That Got Away después de comer pizza e interactuar con tres seguidores afortunados a los que subió al escenario, con los que cantó, a los que abrazó y hasta llegó conversar por FaceTime con la madre de uno de ellos.

Antes de dar la bienvenida a la recta final del show, Katy dedicó All The Love a todas las madres del mundo, para seguir con E.T., Part of Me, Rise y la recién estrenada bandaids.

Con más de un cambio de vestuario, la estadounidense se subió una última vez en la mariposa gigante que ha diseñado para esta gira para ofrecer Roar, Daisies y Lifetimes.

Como colofón final, Firework fue la traca final a una fiesta compuesta por una discografía atemporal y llena de nostalgia, la cual estamos seguros de que sonaría en esta realidad y en cualquier plano astral.