El refugio gratuito y antiestresante para el invierno: dónde están las aguas termales a 52 grados gratuitas de las que todo el mundo habla

En el sur de La Rioja se encuentra uno de los secretos mejor guardados para quienes buscan una escapada invernal diferente: unas aguas termales naturales que alcanzan los 52 grados, ideales para combatir el frío y desconectar del estrés. Este rincón, de acceso gratuito, se ha convertido en un auténtico paraíso para los amantes del bienestar y la naturaleza.

¿Dónde están las aguas termales a 52 grados en La Rioja?

Se trata de las pozas de Arnedillo, situadas en un entorno natural marcado por las montañas de la vertiente sur de la Sierra de Cebollera y el río Cidacos. Ubicadas en un entorno privilegiado, estas pozas termales ofrecen una experiencia única: sumergirse en aguas calientes mientras se contemplan paisajes riojanos de gran belleza. La combinación de temperatura elevada y minerales presentes en el agua proporciona beneficios terapéuticos, como la mejora de la circulación, la relajación muscular y la reducción del estrés. No es casualidad que cada vez más visitantes elijan este lugar para recargar energía durante los meses más fríos.

Además de su carácter antiestresante, estas aguas termales son completamente gratuitas, lo que las convierte en una opción perfecta para quienes desean disfrutar de un plan saludable sin gastar demasiado. El acceso es sencillo, aunque se recomienda llevar calzado adecuado y respetar el entorno para preservar su estado natural.

Este enclave riojano no solo es ideal para relajarse, sino también para combinar la experiencia con otras actividades de la zona. Desde rutas de senderismo hasta visitas a bodegas, el sur de La Rioja ofrece múltiples alternativas para completar una escapada inolvidable. El contraste entre el aire frío del invierno y el calor de las aguas convierte el baño en una sensación única que atrae tanto a locales como a turistas.

Si buscas un plan diferente este invierno, las aguas termales a 52 grados en La Rioja son la respuesta. Naturaleza, bienestar y tranquilidad se unen en un espacio que promete convertirse en tu refugio favorito contra el frío. ¿Lo mejor? No necesitas reservar ni pagar entrada: solo ganas de disfrutar y dejarte envolver por la magia del agua caliente.