Satín Greco, ganadora de Drag Race: "Tenemos la oportunidad de enseñar al mundo que una travesti no solo sirve para una sala de fiestas"

Satín Greco y su drag "marca España" se han coronado como la nueva reina de Drag Race España. La transformista, que lleva más de dos décadas encima de los escenarios, ganó la quinta edición del famoso programa de Atresplayer, superando a Laca Udilla, Margarita Kalifata y Nix, las otras aspirantes que llegaron a la final.

Satín se lleva de este modo, un cetro, una corona y el premio de 50.000 euros. Pero también el reconocimiento a toda una vida dedicada al entretenimiento y la admiración de todas sus compañeras (las de dentro del formato y las de fuera). Lo ha hecho con un drag que ella misma califica como "español". Porque la marca España también le pertenece a ella. Y lo ha dejado claro en cada una de sus apariciones, donde ha rendido homenaje a todas aquellas folclóricas que le inspiran.

Ahora, 24 horas después de ponerse la corona, Satín, con una enorme sonrisa, se sienta a hablar con LOS40.

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¿Qué has hecho en tus primeras horas de reinado?

Ayer, ¿sabes lo que hice? Estar todo el día tirada en el sofá. Bueno, salí del hotel y me fui para casa. Estuve todo el día tirada en el sofá viendo el capítulo. Sí lo digo. Y recibiendo gente que quería ver la corona de cerca. Entonces, cada vez que venía alguien a mi casa, pues era poner el capítulo otra vez. Así que día de pijama y de reventadera. Tengo agujetas hasta los dientes, de los corsés, del elástico... El peso de la cola, ¿sabes lo que pesaba ese vestido de la coronación?

Es verdad que nunca he visto al público y a las concursantes tan de acuerdo con una victoria en Drag Race...

Yo había momentos que sí lo tenía muy claro de que iba a llegar a la fina, pero luego había otros que decía: "Mira, es que esto es una montaña rusa y lo mismo estás un día en el top como que estás en, en lip sync". En tan solo un pesateñeo. A ver todas entramos a lo que entramos, o sea, no hay más. La que diga que no, miente. Todas entramos a por la corona, a por el premio y el primer cometido es intentar meter el pie en la final. Ya una vez que tienes el pie en la final, hay que ir ya ahí a por la corona, o sea, cortando cabezas si hace falta. Pero sí que he sido un poco consciente de que en las redes sociales no tenía un un solo comentario malo. Y estoy muy contenta. Y mi mi mayor premio, aparte de los cincuenta mil y de esa corona que ha cambiado mi salón es todo ese cariño de la gente y de mis compañeras.

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Es verdad que has reivindicado mucho el Drag Español, "marca España" y la palabra "transformismo" en lugar de "Drag". ¿Has visto que en estos años ha cambiado el drag hacia algo más universal?

Ha cambiado muchísimo y para bien. Por todas estas niñas tan jovencitas. Yo empecé muy joven también, pero era otra época. O sea, nosotras empezábamos feas. Éramos feas como el coño, de feas. Éramos horrorosas y encima nos veíamos guapas. ¿Qué pasa? Que en mi época éramos más de micro. Entonces, si tú tenías un buen micro, la imagen daba un poco más igual. Si tú tenías un buen pico, lo tenías todo hecho. . Y aparte que es muy bueno que esto siga para alante porque España tiene mucho arte y que muchos países deben envidiar Y, y Satin Greco es España total. Es como tú has dicho, esa transformista... Soy la primera reina transformista de drag race España, marca España total. No hay más.

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Y hablando de la marca España, todas tus referentes son folclóricas, ¿pero qué artistas actuales siguen la estela de las grandes?

Pues mira, Pastora Soler, por ejemplo. Rosalía, que aunque sea muy moderna, ella lo es. Ella lleva una folclórica dentro que la saca bastante. María Peláez Peláe, Vanesa Martín, Laura Gallego... hay tantas...

¿Y qué vas a hacer con los 50.000 euros del premio?

Pues mira, son 41.000 en verdad, ¿eh? Siempre hay que pensar en Hacienda, cariño. Entonces, con esos cuarenta y uno pues gastármelos seguro. O sea, me los quiero gastar, porque me lo merezco. Pero primero pagar deudas, ¿eh? Porque todo español como Dios manda tiene que tener deudas. Sobre todo con la Seguridad Social y con Hacienda, sino no es un españolque se aprecie. Quedarme limpia de deudas y después me gustaría darme un viajecito con las amigas. Una escapadita, aunque sean pocos días, de relax, sin maquillaje... y lo demás, pues cariño, invertir en proyectos nuevos, en algún techito para tener un colchoncito para esta vejez, que no le queda mucho en llegar, y asegurarme un poco el futuro y la espalda. Porque yo ya a los cincuenta y cinco quiero estar retirada y que me mantengan mis hijas (risas).

Soy la primera reina transformista de drag race marca España total

Te hemos visto en Drag Race España muy cómoda en la interpretación, haciéndolo muy bien, ¿te ves actuando en series o teatro?

Claro que me veo. Hombre, es que sí me veo. Aparte que estoy frita. Tengo muchas ganas de hacer teatro, que es algo que nunca he hecho. Es una rama del arte muy bonita, muy desconocida y muy diferente a lo que nosotras normalmente hacemos o estamos más acostumbradas a hacer, que es la noche o el tarde. Más rollo fiesta de party, coqueteo, ¿tú sabes? Entonces tengo muchas ganas de teatro. El público más de teatro es totalmente diferente al que nosotras estamos acostumbradas. Y está muy bien que ese público tenga la oportunidad y la suerte de conocernos. Y de demostrar al mundo que una transformista, una travesti o una drag queen no solo sirve para una sala de fiestas o para un pub de Chueca. ¿Vale? Entonces, eh, enseñar al mundo de que somos muy válidas. O sea, para la muestra un botón, tenemos a Margarita Califata, que ella es pionera de shows a menores de edad, o sea, de shows a niños. Entonces creo que poco a poco estamos consiguiendo abrir puertas que a lo mejor hace veinticinco años en ningún momento se nos hubiese pasado por la mente. Entonces el mundo se debe dar cuenta que somos válidas y hay que educar al mundo.