Cinco buenas noticias verdes que nos dejó 2025 (sí, también las hubo)
Entre titulares apocalípticos y cifras que inquietan, este año también ha dejado avances destacados para el clima y la naturaleza.
Este 2025 también ha habido buenas noticias para el planeta. / Petmal
Si lees habitualmente El Eco de LOS40 o estás al tanto de la actualidad ambiental coincidirás con nosotros: 2025 ha sido un año intenso. Emisiones al alza, fenómenos climáticos extremos y ecosistemas al límite. Pero ojo: no todo ha ido mal. Lejos de los focos y sin demasiado ruido mediáticos, también han pasado cosas buenas que merecen ser contadas. Aquí van cinco noticias medioambientales optimistas que dejan claro que, cuando hay voluntad, el planeta responde. Y que, por tanto, hay esperanza de cara a seguir trabajando por un mundo mejor para todos los que lo habitamos.
1. Más energías renovables. Por primera vez, la energía eólica y solar han superado al carbón como principal fuente de electricidad a nivel mundial. El impulso ha sido especialmente fuerte en países como China o Reino Unido, donde el viento y el sol ya cubren buena parte de la demanda. No es la solución definitiva al cambio climático, y hay muchas cosas que mejorar, pero no hay duda de que se trata de una señal clara de que el modelo energético está cambiando de dirección.
2. Océanos (un poco) más protegidos.Tras arduas discusiones, debates y desencuentros, este 2025 que ahora termina se ha desbloqueado por fin el Tratado de Alta Mar, un acuerdo histórico que permitirá proteger hasta el 30% de las aguas internacionales del planeta. Además, se ha creado la mayor Área Marina Protegida del mundo en la Polinesia Francesa. Más protección significa más biodiversidad, mares más sanos y un respiro para especies que llevan décadas al límite.
3. La deforestación da una tregua. Tras años devastadores en ese sentido, Brasil ha registrado su nivel más bajo de deforestación en más de una década. De manera paralela, y a nivel global, las tasas actuales son mucho menores que las de finales del siglo pasado. No es momento de cantar victoria, pero sí de reconocer que las políticas de protección forestal y la presión internacional empiezan a dar resultados tangibles.
4. Un golpe legal contra los grandes contaminadores. La Corte Internacional de Justicia ha emitido una decisión clave que abre la puerta a que los países más afectados por el cambio climático puedan demandar a los grandes emisores. No es vinculante, pero sí marca un antes y un después: contaminar ya no es solo una cuestión ética, también puede acabar en los tribunales.
5. La naturaleza se defiende. Las tortugas verdes han salido oficialmente de la categoría de "en peligro" gracias a décadas de conservación, y la población de tigres en India se ha duplicado en poco más de diez años. Es verdad que son sólo dos ejemplos entre un mar de extinción, pero también la demostración palpable de que proteger la fauna funciona, aunque requiera tiempo, inversión y constancia.