Los sellos discográficos zanjan con 2.000 dólares la demanda contra una niña por piratería
Tras el acuerdo "amistoso" alcanzado entre los sellos y la particular, quedan aún 260 demandas por resolver
Por primera vez, la RIAA cursó ayer 261 demandas en el marco de su guerra contra la piratería online, contra usuarios particulares que copian música en la Red. Las demandas desataron una conmoción entre los partidarios de servicios "amistosos", así como un frenesí en los medios, después de que los prestigiosos The New York Times y The New York Daily News difundieran la demanda de Lahara.
"Entendemos ahora que el intercambio de música era ilegal", dijo Torres en un comunicado anoche. "Pueden estar seguros de que Brianna no lo hará más". "Lamento lo que he hecho. Amo la música y no quiero afectar a los artistas que amo", dijo por su parte Brianna Lahara. Hasta ahora, la RIAA había apuntado sus armas legales hacia Kazaa y otras redes similares que la industria responsabiliza, en parte, de la caída en las ventas mundiales de CD. Pero la piratería no cesa. Conforme a la legislación que protege los derechos de autor, los acusados enfrentan penas de hasta 150.000 dólares por canción, pero los acuerdos fijarán probablemente cantidades más asequibles.
"Estamos recibiendo un montón de llamadas y prevemos alcanzar muchos acuerdos (extrajudiciales)", dijo Matt Oppenheim, vicepresidente de asuntos legales y empresariales de la RIAA. Sin embargo, el grupo comercial ha advertido de que proseguirá pronto con las demandas.