Color Gitano

Estar toda la vida en el gusto del público. El deseo de Rosario es tan sencillo como difícil de llevar a la práctica para tantos aspirantes a artistas. Pero ella va ya por su sexto álbum, o séptimo, según se mire. Durante la entrevista con 40 Magazine desborda energía y vuelve a evidenciar que es un espíritu libre.

?Rosario, ¿cómo te encuentras ahora que encaras las tareas promocionales de tu nuevo álbum?

?Muy bien, con buenas vibraciones. Generalmente, mis discos me gustan mucho. Yo soy una artista de directo, lo que me gusta es cantar en el escenario, y todas las canciones que elijo las hago muy mías, las siento muy dentro para luego cantarlas en directo.

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?Nos decías durante la charla del disco anterior que tu misión en la vida era alegrar los corazones de la gente. ¿Dispuesta a continuar la sagrada tarea?

?Pues sí, porque nos hace falta mucha alegría. Si eres artista y tienes la suerte de poder emocionar a la gente, yo quiero conseguirlo. Que las personas suelten sus sentimientos con mis canciones. En este disco tengo un montón de rumbas muy buenas que pueden escuchar todos en las fiestas, para bailar y cantar y llenarse de alegría.

?Una curiosidad. En la biografía promocional que acompaña el nuevo álbum se hace hincapié en que tu carrera comenzó en 1984 con el disco Vuela una noche. ¿Has querido tú que se recuerde aquella obra? La mayoría de tu público cree que te lanzaste al ruedo discográfico con De ley en 1992.

?Aquel disco del 84 fue un trabajo que hice muy jovencita. Todavía tenía miedo a decir ?esto no me gusta?. Bueno, fue un disco que estuvo bien pero no tuvo ninguna repercusión. Realmente, después de ese disco me planteé que el siguiente sería auténtico y de verdad. Ese disco fue De ley. Personalmente, creo que mi primer disco fue De Ley. Sí, hice otro antes que se llamó Vuela una noche. Yo siempre tuve muchas ganas de cantar. Desde muy pequeña quise ser artista, dedicarme a esto de la música, y esas fueron las prisas que me llevaron a grabar aquel disco. Yo era muy jovencita y no estaba muy hecha.

?Es decir, que De mil colores es tu sexto disco, aunque en realidad es el séptimo.

?Así es. Vuela una noche es un disco que no conoce nadie. Se menciona en mi biografía, pero no fue un disco decisivo en mi carrera. Fue uno de esos discos que hacen artistas jóvenes: te dan las canciones y te imponen al productor. Así nunca funcionan las cosas. Ahí aprendí que un disco se debe hacer de corazón y con gente que te conozca y que sepa lo que tú quieras. En fin, De mil colores es mi sexto disco.

?En esta profesión lo difícil es mantenerte. Yo tuve mucho éxito con mi primer disco, De ley. El primer éxito siempre es el fácil. Pero luego vienen los demás. Debes mantenerte, seguir dando a tu público lo que quiere. Ahora, por ejemplo, se publica mi disco en América al mismo tiempo que en España. Allí tengo un público maravilloso que conoce todas mis canciones, y eso es muy grato, me siento muy feliz y orgullosa. Ahora es cuando realmente estoy viendo el beneficio de todos los años que llevo en esta carrera.

?Perdón por hablar de la edad, pero acabas de cumplir 40 años, ¿no? No parece que te afecte mucho la temida crisis...

?Yo no creo que sea feo hablar de eso. Yo estoy muy orgullosa de cumplir la edad; si no estaríamos muertos. La sociedad está muy equivocada en eso. Yo no llevo mal lo de la edad porque además tuve una maestra que nunca me dijo lo que era la edad, nunca me hizo sentir que la edad fuera algo malo, todo lo contrario. A mi madre le daba igual la edad porque ella siempre era joven por dentro. Yo también soy muy joven de espíritu y me siento bien con 40, 50 ó 60. Y de momento no tengo ninguna crisis. Estoy en la plenitud de mi vida, por fuera y por dentro.

?¿Cuál fue la declaración de intenciones al plantear este álbum? ¿Quizá una cierta continuidad respecto a la línea rumbera de Muchas flores?

?Bueno, yo sigo siendo fiel a mi estilo, quiero serlo siempre. Es un estilo que me ha costado mucho crear, ya es el estilo Rosario. Aparte, sé que eso es lo que quiere la gente de mí, lo que le gusta. Esta es la música que a mí me sale del corazón, mi música fácil. Si me meto en otros territorios que no entiendo mucho, me cuesta más. Con esta música practico la ley del mínimo esfuerzo: es la que me fluye de forma natural, la que mejor expreso, la que más disfruto, la que me viene de la magia.

?Dentro de esa 'línea Rosario', lo cierto es que cada vez se te ve más rumbera, como decía, y más festiva, incluso recuperando la herencia de aquella rumba catalana que interpretaba tu padre.

?Sí, hay muchas rumbas en mis últimos discos, pero también en los anteriores. En De ley ya estaba Mía mama y Escucha primo, que venían del ritmo de la rumba catalana. Mi padre fue el que me metió ese ritmo en el cuerpo. La rumba catalana se puede mezclar con guitarras y bajos funkies. Ese es el estilo que yo he creado. Ahora mismo, como te decía, tengo un público maravilloso en América que se muere por mis rumbas y por mis baladas.

?Te hemos visto en otros discos cantando a las cosas bonitas, el color, la vida en general. Del nuevo álbum llama la atención, así, de entrada, el título tan colorista y vitalista.

?Bueno, he titulado el disco De mil colores porque ese es también el título de una canción que me ha salido del alma, y porque yo me he llenado de colores este año. He estado viajando por el mundo entero, he conocido a gente maravillosa de muchos países. He estado con Carlinhos Brown, y tengo una canción suya, Juras de samba. También tengo dos rumbas cubanas, son versiones a lo Rosario. Y bueno, ahora estoy en una época optimista y quiero darle alegría a la gente. Antes los llené con flores, y ahora quiero darles colores. Las flores y los colores, como la música, son muy buenos para el espíritu del ser humano, y yo soy muy espiritual.

?Tu arte no es en blanco y negro.

?No. El blanco y negro está muy bien, pero yo estoy en la época de color. Yo soy optimista. Me gusta mucho la vida. Pienso que la vida es maravillosa. Y eso es lo que quiero decirle a la gente, transmitir esa sensación.

?En una hermosa entrevista, tu hermano Antonio nos decía hace una década que en la música estaba todo aún por descubrir; que los músicos eran como pintores que usaban siempre colores diferentes en la paleta. Esa filosofía de vida la llevas en la sangre.

?El arte es infinito, es como un universo entero. La música, la pintura, el cine, el baile... Cuando haces un disco tienes millones de variantes: puedes meter miles de guitarras diferentes, miles de bajos diferentes... Todo el arte es igual. El arte es eso y estará toda la vida con nosotros.

?De mil colores es un disco primaveral que ve la luz, paradójicamente, a las puertas del invierno.

Eso hay que preguntárselo a las compañías de discos. Yo me dedico a la música, a las canciones bonitas, y ellos son los que se dedican a venderlas. Ello saben por qué hacen las cosas. Bueno, imagino que en Navidad hay más ventas. A mí me da igual: yo hago un disco y que lo saquen cuando quieran, lo más rápido posible.

?El grueso del nuevo disco lleva tu firma. Y como sucediera como el disco anterior, el primer single es también de tu puño y letra.

?Sí, la mayoría de las canciones son mías. También hay una canción de Alberto Moraga, con quien hice Agua y sal, otra de Carlinhos Brown y las dos versiones de rumbas cubanas. Todos los demás son míos. Cada vez voy componiendo más y me van saliendo canciones más bonitas. En Muchas flores hice Cómo quieres que te quiera y he visto que todo el mundo la cantaba de arriba a abajo, eso te satisface mucho. Ojalá siempre me salgan canciones. Siempre digo que las musas no se olvidan de mí y me mandan canciones. Ahí están para todo el mundo. A veces me sorprendo de que me salgan esas canciones. Yo sólo me dejo llevar.

?De mil colores, la canción, suena a balada sinuosa, la línea melódica de la que hablabas antes.

?Sí, yo siempre defiendo las canciones que me salen del alma porque creo que así voy a llegar más a las almas de las personas. Me pasa también con canciones de otros, como Atado a esa mujer, que canto con Antonio Carmona. Tengo la suerte de rodearme de gente que siempre me ayuda. Pero yo lucho por las canciones en las que creo: Cómo quieres que te quiera, De mil colores... Canciones muy bonitas, canciones mágicas que yo canto de forma natural.

?¿Alguna otra joya de la que te sientas orgullosa?

?Sí, Los tangos de mi abuela. Son unos tangos de Cádiz que cantaba mi madre hace tiempo, y que la letra está sembrá, tiene mucha gracia. Yo he hecho una versión para mí. También me gusta mucho Vueltas, una canción funkosa que canto con el grupo Malabar, y sobre todo cuatro o cinco rumbas para que la gente baile y baile sin parar.

?Siempre grabas en casa y con tu gente de confianza.

?Sí, grabo en España y si quiero una guitarra funky y gitana, ¿a quién voy a llamar? Pues a Raimundo Amador. No voy a hacer experimentos, no voy a encontrar a nadie con su sonido. Lo mismo pasa con el productor Fernando Illán, Antonio Carmona...

?Te hemos visto en el tributo a Sabina, Entre todas las mujeres, donde cantas Que se llama Soledad, que, por cierto, fue el primer single. Cuando participas en estos discos ?Tatuaje, tributo a Serrat, el disco a beneficio del cáncer de mama? no lo haces por cumplir...

?Hombre, Sabina es un artista genial y yo lo quiero mucho como persona. Que me llamen para cantar algo de él me enorgullece. Me costó un poquito porque es difícil llevar a tu terreno algo tan personal. Lo hice como regalo a él. Y sí, parece que las versiones me quedan bonitas. Un día de estos tendré que hacer un disco sólo de versiones...