La industria del espectáculo de EE UU censura sus mayores galas
La controversia generada tras la actuación de Janet Jackson en la Super Bowl ha desatado una oleada de puritanismo
El escándalo generado por el seno furtivo de Janet Jackson visto en la televisión estadounidense ha causado una reacción en cadena que amenaza con imponer la censura no sólo en los Grammy sino incluso a los Oscar. Jackson, en el centro de este escándalo, ha abandonado la lista de invitados a la 46 edición de los Grammy que se celebran este domingo.
El diario Washington Post señala que CBS, la cadena que retransmitirá los premios y ofreció en directo la final de la Super Bowl, y la Academia del Disco esperaban, como finalmente sucedió, que la hermana de Michael Jackson se retirase de la ceremonia de los Grammy "de manera cortés?. Advirtieron que de no hacerlo se le retiraría la invitación.
Pero además, la organización ha aceptado imponer un "decente retraso" en la retransmisión que permita a la cadena de televisión eliminar cualquier contenido que pueda herir la moral de los espectadores.
El mismo retraso se aplicará al espectáculo organizado para mantener la atención del público durante la retransmisión del "Partido de las Estrellas" de la NBA en Los Angeles, una semana más tarde.
Incluso la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas, que está preparando su entrega de los Oscar, no parece inmune a esta epidemia de decencia.
La cadena ABC, encargada de la retransmisión de la 76 edición de los Oscar, está analizando la posibilidad de diferir la emisión de las imágenes unos segundos para facilitar una posible censura.
A diferencia de otras galas de Hollywood, la entrega de los Oscar se precia de ser en directo para todo el país sin tan siquiera un retraso en su audio para editar las palabras malsonantes.
Sin embargo, esto puede cambiar tras el escándalo generado el pasado domingo por la visión furtiva del pecho derecho de Jackson, que quedó expuesto ante las cámaras.
La controversia ha pasado también a otros momentos de ese mismo espectáculo, durante el descanso del Super Bowl, ante las quejas generadas por el uso del cantante Kid Rock de la bandera estadounidense como camiseta, o las manos que el rapero Nelly posaba en sus ingles constantemente.
Además del retraso que se impondrá en los Grammy, que puede llegar a ser de cinco minutos, la cadena NBC ha decidido eliminar el plano de un seno de una mujer de 80 años que se podía ver en el episodio de la serie ER (Urgencias) que se emitió ayer.
"Aunque pensamos que el plano es apropiado en su contexto y a la hora a la que estaba previsto, desafortunadamente el clima creado esta semana hace muy difícil su emisión", ha informado la cadena.
Se trata de una ola de decencia no falta de crítica por aquellos que piensan que el asunto está llegando muy lejos y puede tener repercusiones no deseadas.