'Día Juanes': "A Dios le pido seguir haciendo música"

El último encuentro con seguidores enfervorecidos se producía en el World Trade Center de Barcelona tras un lardo día. Pero Juanes, con toda la tranquilidad y profesionalidad del mundo, atendió a los compromisos, incluso disfrutando. "Siempre me pongo nervioso antes de un concierto, es una especie de respeto hacia el público", confesaba. También que su mayor vicio es llevarse la guitarra a todas parte. "Me la llevo al baño", decía.

Venía de Valencia. Se le atisbó allí a Juanes, quizás, un cierto aire de timidez, momentánea, en la Universidad de Valencia. Al fin y al cabo, está acostumbrado a tocar sus canciones ante miles de personas, pero no a contestar a preguntas (fueron enviadas por sus seguidores por SMS) ante una gran audiencia, llena de latinos y compatriotas del colombiano, como la allí presente que casi estaban fuera de sí. Sira se las iba comunicando. "A Dios le pido por la salud de mis hijas, de mi familia, por seguir haciendo música", manifestaba con sinceridad. La misma que empleaba al reconocer que tiene "defectos, como cualquier ser humano". También respondía a la polémica suscitada en República Dominicana por el doble sentido de la letra de La camisa negra. "Está basado en el folklore colombiano: doble sentido con sexo, pero es como un chiste de humor negro", respondía con resignación ante la mentalidad obtusa de algunas personas. Respecto a la fama, un tipo muy cabal: "Me lo tomo con calma".

Antes, camino de la ciudad del Turia y cargado, comía en el avión junto con los que le acompañaban en la cuarta aventura de este tipo de Los 40 Principales (Blur en 1997, Alejandro Sanz en 2001, David Bisbal en 2004). ?La paella es mi comida favorita?, sentenciaba. Sin saberlo estaba cogiendo fuerza para cargar con los nuevos mil y un regalos que recibiría en Valencia, entre ellos, alguno para sus hijas.

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A las 12:00, en Sevilla, Juanes también lo pasaba en grande. "Estoy disfrutando mucho", comentaba Juanes ante 300 seguidores en la sala Antique de Sevilla. Y eso, a pesar de su gran fobia: "El miedo a volar siempre ha estado ahí, aunque ya lo tengo más controlado". Y es un alivio, porque el Día Juanes sólo se puede llevar a cabo viajando en avión. También respondía a una pregunta de Sira sobre sus tatuajes. "Tengo cuatro tatuajes de etapas que han marcado y van marcando mi vida: tienen su significado". En la portada de Mi sangre se adivinan.

A las ocho y cinco de la mañana, con una sonrisa de oreja a oreja, Juanes entraba en el estudio de Los 40 Principales de Madrid. Allí, charlaba con diez oyentes invitados quienes han protagonizado las primeras muestras de cariño y admiración hacia el colombiano. Mientras un fan había traído consigo una guitarra con la que sorprendía al de Medellín, otra invitada le regalaba una fotografía enmarcada que el colombiano ha agradecido de todo corazón.

Siempre profesional, tras las conexiones respectivas con Los 40 Principales en las distintas ciudades, atendía a la prensa. Allí recordaba que en breve viajará por Europa para dar varios conciertos. Después, de vuelta a América Latina, a seguir con la promoción de Mi sangre en Venezuela. Y en verano, de gira con grandes conciertos por España. Ya le estamos esperando.