Sean Paul refleja la dureza social de Jamaica en 'The trinity'
Dice que el disco también suena más contundente que <i>Dutty rock</i>, su anterior trabajo
Pero a pesar del cambio hacia un sonido algo más duro, The Trinity es un trabajo en el que se invita a vivir la vida con plenitud, a pesar de los malos momentos y del estado actual de las cosas, como explica el propio Sean Paul. "Muchos de los temas muestran su evolución con diferentes coros y un sonido más contundente. Sigue siendo un álbum muy divertido en el que trato de hacer olvidar a la gente lo mal que lo está pasando el mundo. Todos deberíamos disfrutar de la vida".
Junto a este aspecto divertido y desenfadado del álbum, Sean Paul no se olvida de lo que ocurre a su alrededor en sus canciones. "Han matado a 600 personas en los últimos 6 meses en Jamaica", comenta el artista. "No puedo ni quiero dejar de hablar de ello. Esto no es Irak donde la gente se mata por petróleo. Aquí la gente se mata por un dólar. Es de locos. El mensaje que quiero dar con The trinity es que incluso en los peores momentos, siempre hay un momento para disfrutar. La vida es un regalo", afirma.
Así, por ejemplo el tema Never gonna be the same es un homenaje a su amigo Daddigon, que resultó muerto en un tiroteo a principios de este año. Por otro lado, este The Trinity es el disco en el que Sean Paul dice haber llegado a la definición final de su sonido.
Con su segundo trabajo, Dutty Rock (2003), Sean Paul recibió un premio Grammy además de muchos otros galardones, habiendo vendido más de seis millones de discos y viajado por todo el mundo. A Sean Paul hay que reconocerle el mérito de haber ayudado a popularizar el dancehall (una variante del reggae enfocada a las pistas de baile) a niveles masivos, contribuyendo también a que aumente el reconocimiento y la atención por otros artistas que se expresan desde estas mismas coordenadas.