Madonna se 'confiesa' en el escenario de un club londinense
La Reina del pop presentó anoche su nuevo disco con una actuación en la discoteca Koko

La cantante estadounidense, ahora afincada en la ciudad del Támesis, convirtió el Koko, local en el que debutó en Inglaterra en 1983 cuando se llamaba Candem Palace, en un club de los años 80, con bola de cristal incluida. La Ciccone regaló sólo cinco canciones al millar de afortunados, entre concursantes y demás invitados (entre los que estaban los miembros de Pet Shop Boys y el cantante de New Order, Bernard Sumner, según informa nme.com). Algunos llevaban varias horas haciendo cola frente al recinto para poder coger el mejor sitio.
Madonna interpretó cuatro de sus nuevas canciones, Hung up (el primer sencillo de COADF), Get together, love New York (su particular homenaje a la ciudad en la que vivió y en "la que aprendí a sobrevivir", según palabras de la propia artista) y Let it will be. Para terminar, volvió al principio. Echó la vista atrás y cantó Everybody, corte incluido en su álbum debut, que además fue su primer single.