Especial
Alejandro Sanz y Juanes, entre los colaboradores del debut en solitario de Antonio Carmona
<i>Vengo venenoso</i>, producido por Gustavo Santaolalla, verá la luz el próximo 16 de octubre
"Después de veinte años con Ketama siempre queda alguna secuela, pero el sonido de este disco no tiene nada que ver con Ketama. Es un disco minimalista, muy seco, sin apenas instrumentos", dice el cantante y percusionista, que reconoce que en esta ocasión ha recurrido a las guitarras eléctricas "porque las de mi hermano no se podían sustituir".
Por eso hay un tema, Lucía, dedicado a su hija; otro llamado Hay veces, inspirado en la separación de sus padres; otro, 1, 2, 3, en el que cuenta cómo siente eso de "volver a empezar" y otros como Para que tú no llores, en el que canta Alejandro Sanz o Puerto moruno, en los que habla de tema de la inmigración en España.
Además de editar disco, Antonio Carmona trabaja en la actualidad en la música de una versión gitana del clásico de Shakespeare El sueño de una noche de verano, que dirigirá Tazmin Townsend, y que se estrenará el próximo año.
Considerado uno de los principales responsables de la difusión del cajón en el flamenco, asegura que, en contra de lo que dicen algunos "puristas" del arte jondo, este instrumento de origen peruano "no le ha hecho daño" al flamenco, como tampoco las fusiones hechas con corazón.
"A los puristas hay que decirles que ya estamos en el siglo XXI, que somos músicos abiertos y que lo bueno es tener todo el abanico", señala mientras se lamenta de que en España "estamos un poco retrasados en la música. En Los Angeles hay ochenta emisoras de radio, de todos los estilos. Aquí siempre se oye lo mismo".