Javier Bardem, candidato al Oscar por su papel en 'No es país para viejos'
Bardem volverá a competir, el próximo 24 de febrero, por un Oscar al Mejor actor de reparto.
Bardem, que ya optó a la estatuilla por su trabajo en Antes de que anochezca (2000), de Julian Schnabel, fue premiado como mejor actor de reparto en la última edición de los Globos de Oro. No es país para viejos se estrenará en España el 8 de febrero. Los hermanos Coen, Joel y Ethan, realizadores de la cinta coprotagonizada por Bardem, son también candidatos a la mejor dirección y a la mejor película.
Los rivales del español serán Casey Afleck (El asesinato de Jesse James...), Hal Holbrook (Hacia rutas salvajes), Tom Wilkinson (Michael Clayton) y Philip Seymour Hoffman por La Guerra de Charlie Wilson.
Además de No es país para viejos, los títulos Expiación, Pozos de ambición, Juno y Michael Clayton lucharán por la categoría de Mejor Película.
Los actores Daniel Day Lewis, George Clooney, Johnny Depp, Tommy Lee Jones y Viggo Mortensen son los candidatos en la categoría de Mejor Actor. Las actrices Cate Blanchett, Julie Christie, Marion Cotillard, Laura Linney y Ellen Page fueron seleccionadas en la categoría de Mejor Actriz.
La producción israelí Beaufort, y la austríaca The Counterfeiters figuran entre las candidatas a la categoría de Mejor Película Extranjera. Junto a ellas se encuentran la película Katyn de Polonia, Mongol de Kazajistán y 12 de Rusia. No hay, por tanto, ninguna película en lengua española que compita en esta edición de los Oscar.
Asimismo, el compositor español Alberto Iglesias ha sido seleccionado como candidato a los Premios Oscar en la categoría de Mejor Música Original por su trabajo para la película Cometas en el cielo. Se trata de una cinta basada en la novela de Khaled Hosseini Cometas en el cielo y dirigida por el alemán Marc Foster, el director de Descubriendo Nunca Jamás.
Los resultados de la votación de los nominados a la 80 edición de los oscars se han dado a conocer hoy a las 14.30 (hora peninsular española) durante una rueda de prensa en el Teatro de la Academia Samuel Goldwyn, en Beverly Hills.
Las dudas sobre la celebración de la gala de los oscars continúan vivas. El motivo no es otro que la situación que viven los guionistas de Hollywood desde el pasado 5 de noviembre, enfrascados en una pugna con la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP, por sus siglas en inglés) por los ingresos que los escritores reciben por la venta de las series de televisión en DVD y por las emisiones de esos formatos por internet.
El Sindicato de Guionistas (WGA) ha prohibido que los escritores lleven a cabo su trabajo durante la ceremonia y no tiene previsto hacer ninguna excepción en esta ocasión. Las conversaciones entre ambas partes podrían reanudarse próximmente, aunque si la huelga mantiene su curso la Academia de Cine de Hollywood podría seguir la estela de la Asociación de la Prensa Extranjera, que concede los Globos de Oro, y anunciar los ganadores mediante una conferencia de prensa o modificar ostensiblemente el formato del acto.
Gil Cates, productor de la retransmisión de los oscars, ha asegurado que la gala se llevará a cabo independientemente del cariz que tome la huelga en las próximas semanas, y señaló que la Academia podría rescatar imágenes pertenecientes a la historia de la ceremonia si los escritores y los actores deciden no cooperar. "Planeamos organizar el espectáculo el 24 de febrero en el Teatro Kodak ante una audiencia de unas 3.300 personas y de muchas más a través de la televisión", aseguró la portavoz de la Academia Leslie Unger.
La gala de los oscars, que el año pasado logró reunir frente a los televisores a 40,2 millones de estadounidenses, es uno de los espectáculos por excelencia de la programación de Estados Unidos junto a la Super Bowl, la final del fútbol estadounidense.