Janet se toma una tila

Janet ya no es una niña y se mantiene en forma para disfrutar de su madurez. Con su voz que recuerda al Michael Jackson más puro (maiki), la hermanísima que arrasa en Estados Unidos se siente cómoda en nuevo trabajo, el décimo, Discipline. Busca su espacio alejada de posturas futuristas o blandengues del pasado de la música disco y se acerca otra vez al 'aranbí' que tanto gusta. Calidez, ritmo medio, mucho chismorreo en los comienzos de los temas (conversaciones con amigas, etc) y optimismo como nota preominante.
Madame Jackson se ha tomado una tila y, aunque amaga con mover las caderas en Feedback, Rollercoaster o Rock with u, tampoco se ha desmadrado. Tras el 'pezóngate' Janet está más pausada, menos hierática. Tiene futuro hasta en el cine. Lo que hace estar en la cumbre...