Lily Allen asegura que está arruinada y ha vendido su coche para pagar las facturas
La cantante no ha mencionado si planea vender también la isla que compró hace unos meses
Allen ha tenido que vender su BMW 320, valorado en unos 40.000 euros, para pagar sus facturas: "Tuve que vender mi coche porque estoy en bancarrota. Lo compré el año pasado y ese fue probablemente el mayor despilfarro que he hecho en mi vida. La ropa, también. Siempre estoy comprado ropa. Estoy sin blanca"
La cantante londinense, que triunfa en este momento con su nuevo disco, It's not me, it's you, añade: "Estoy esperando a que me lleguen los royalties del nuevo álbum, pero eso tarda alrededor de un año. Ni siquiera puedo utilizar las tarjetas de crédito. Habitualmente, los bancos te adelantan el dinero en este tipo de situaciones, pero ahora no hacen préstamos... son tiempos difíciles"
Además del coche y de la ropa, Lily no se acuerda de mencionar la isla que se compró en una playa jamaicana durante una borrachera. Entonces, estaba encantada con su adquisición y aseguraba: "¡Es la mejor compra que he hecho estando borracha!".