The Rolling Stones: Siempre hay más
El próximo 18 de mayo se reedita Exile on Main Street
Primavera de 1971, después de Sticky Fingers, los miembros de la banda se mudaron a Francia. La causa, sus deudas fiscales y "escapar" de los elevados impuestos que debían pagar en el Reino Unido. En ese "exilio" grabaría este álbum en un ambiente caótico, que dio lugar a una de las mayores joyas de una trayectoria en la que se hace difícil hacer "menciones especiales". Una genialidad creada en el sótano un castillo y con un Richards bastante enganchado a las drogas. 18 canciones en cuatro caras, llenas de rock, blues, góspel y soul.
Para quienes no habíamos nacido por entonces (o sí), ahora es un buen momento para revivir la magnificencia de un disco absolutamente imprescindible. Para añadir interés a esta reedición, si es que lo necesita, se incluyen canciones "nuevas", o más bien recuperadas, como "Plundered My Soul", "Dancing In The Light", "Following the River" o "Pass The Wine". Aun hay más nuevas versiones de "Soul Survivor" o "Loving Cup".
Para los "fanáticos" de la banda aparecerá una edición "Super Lujo" con vinilo, documental de 30 minutos en DVD con imágenes de "Cocksucker Blues", "Ladies and Gentlemen". "Un libreto de 50 páginas con fotos y el nuevo documental "Stones in Exile". Este último se podrá ver en la TV en Estados Unidos e internacionalmente a través de la BBC, un documental con material inédito de aquella época, dirigido por Stephen Kijak.
Casi 40 años después, y lo que nos queda, siempre es un placer poder seguir escribiendo "lo nuevo de los Rolling".