¿Qué fue de Natalie Imbruglia?
La cantante australiana cumple 45 años y sigue siendo recordada por 'Torn' a pesar de tener cinco discos y una carrera en el cine
A finales de la década de los 90 hubo una canción que sonó tantas veces en la radio mientras su icónico videoclip era programado una y otra vez en televisión que probablemente ninguna persona que haya vivido esa época habrá podido sacarse todavía de la cabeza su pegadizo estribillo. El tema en cuestión se llamaba Torn y su intérprete era Natalie Imbruglia, una jovencita australiana que acababa de lanzar su primer disco después de haber actuado durante años en la serie televisiva más exitosa de su país, Neighbours, donde también hizo sus primeros trabajos Kylie Minogue.
Natalie Imbruglia dio la vuelta al mundo en 1997 con este, su primer lanzamiento, una canción en la que aseguraba tumbarse “desnuda” en el suelo llorando por un hombre que le había roto el corazón. El tema pronto se convirtió en una especie de himno para el mal de amores, y poco importó que en realidad fuera una versión de una banda californiana de rock alternativo llamada Ednaswap. El Torn de Imbruglia consiguió coronarse como número uno en las listas de éxitos de medio mundo, lo que le abrió las puertas a los premios Grammy, donde logró tres nominaciones, entre ellas la de mejor interpretación vocal femenina.
De la noche a la mañana, Natalie se había convertido en una superestrella del pop, con seis millones de copias vendidas de su debut, Left of the middle, un éxito que no lograría repetir con sus siguientes lanzamientos.
Mientras que su carrera cinematográfica se vio impulsada por su participación en Johnny English, un taquillazo protagonizado por Rowan Atkinson, en el terreno musical sufrió un duro golpe cuando su discográfica se negó a lanzar el que habría sido su tercer álbum al considerar que su sonido "no era lo bastante pop", lo que motivó que la artista lanzara Counting down the days con otro sello. Si bien el álbum no llegó a lo más alto de las listas, sí lo hizo su single Shiver, cuyo espectacular videoclip homenajeaba a la película El mito de Bourne.
Más prometedor aún parecía su siguiente álbum, Come to life, desde el momento en que se supo que el líder de Coldplay, Chris Martin, había escrito algunos de sus temas, pero finalmente las ventas de este trabajo lanzado a través de su propia discográfica acabaron siendo decepcionantes.
Desde entonces, la cantante se mantuvo ocupada ejerciendo de juez en la versión australiana de X Factor y reactivando su carrera de actriz con papeles en films como Closed for winter o Underdogs, mientras que su vida sentimental, tras su divorcio del cantante de Silverchair, ha sido una verdadera montaña rusa que supuestamente ha incluido romances con celebrities como will.i.am, Josh Hartnett o el mismísimo Príncipe Harry.
Se acabó, no voy a pedir más disculpas por ser guapa
Su esperado regreso musical se produjo en marzo de 2015 con Male, donde versionaba canciones grabadas por artistas y grupos masculinos, como Daft Punk, Cat Stevens, Damien Rice o The Cure. En esta ocasión tampoco logró el favor del público más allá de sus fans. Aún así, le llevó a hacer una ronda de conciertos en acústico por Europa, con actuación en la sala Razzmatazz de Barcelona en febrero de 2017.
Siempre se ha mostrado contraria a la política migratoria de Donald Trump en las redes sociales, comprometida con el medio ambiente y el feminismo. En este sentido, en una entrevista realizada en 2015 confesó que se sentía molesta por la gente que siempre le preguntaba por su físico. “La suposición era que estaba donde estaba debido a mi apariencia. Pero ahora tengo 40 años, y ya se acabó. No voy a pedir más disculpas por ser guapa”, declaró la artista, que más de dos décadas después continúa siendo conocida por ponerse en la piel de una mujer desconsolada en Torn.