Especial
El look de Miranda Kerr
La modelo, nueva cara de H&M, sabe como impresionar al personal
Durante años hemos visto a Miranda Kerr ocupando las marquesinas de autobús de medios mundo por ser imagen de marcas de ropa como Mango y al otro lado del Atlántico de la firma lencera Victoria’s Secret. No había año ni desfile en el que Kerr no recorriera la pasarela luciendo escuetos biquinis y unas enormes alas de ángel. Era un ángel de Victoria. Ahora parece que el ángel vuelve a pisar el asfalto y ha sido escogida como imagen de H&M, la cadena de ropa sueca, de la que ya han formado parte de sus anuncios Daria Werbowy o Cara Delevignge.
La modelo australiana más internacional con permiso de Elle Macpherson, es una de las más copiadas por los seguidores de street style de medio mundo. Todo lo que se pone lo convierte en tendencia, pero siempre desde un estilo sencillo, fácil y apto para casi todos. Si bien es cierto que no todas las mujeres del mundo comparten las medidas de escándalo de la maniquí, Miranda no resulta excesivamente delgada y tiene una belleza bastante ajustada a la realidad. Sus labios carnosos y perfectos han resultado en más de una ocasión el reclamo idóneo para las firmas de cosméticos.
Y precisamente son los labios lo que la modelo nunca descuida. Ya sea para ir a ver un partido de baloncesto, salir de compras o posar ante la cámara, el maquillaje en forma de labiales no falta ni en su bolso ni en el tocador. Rosas, rojos y corales son sus predilectos pues Miranda disfruta sobre todo con los maquillajes más naturales cuando no tiene que estar pintada por exigencias de su trabajo.
Vaqueros, sombreros panamá, americanas… los básicos que conforman el armario de la australiana consiguen que sus outfits sirvan lo mismo para el día como para ocasiones informales por la noche. Cuando tiene que posar en algún photocall sus opciones para la alfombra roja resultan muy sorprendentes y en los últimos meses se ha dejado ver en más de una ocasión luciendo ombligos y crop tops ante los fotógrafos que la esperaban.