Quince datos curiosos que no sabías de Brad Pitt
El actor no es solo una cara bonita más de Hollywood
Hace algunos días te contábamos que Brad Pitt cumplía 50 años, nada menos. Con una carrera a sus espaldas de más de tres décadas, el protagonista de ‘El Árbol de la Vida’ tiene mucho recorrido a sus espaldas. Te contamos quince curiosidades del guapísimo actor que quizá se te habían pasado por alto o que ya conocías (pero que nunca está de más recordar).
Antes de ser actor, Brad Pitt fue camarero, limpiador de piscinas y otros trabajos poco cualificados. Nunca se le cayeron los anillos a la hora de buscarse la vida.
El actor también fue uno de los estudiantes más activos de su escuela y practicaba deportes todos los días. Sus favoritos eran el baloncesto y el golf.
Junto a su pareja Angelina Jolie, encabeza el ránking de parejas que más dinero ingresan juntas cada año.
La primera fotografía de sus hijos gemelos se vendió por nada menos que catorce millones de dólares.
El actor estuvo comprometido con la actriz Gwyneth Paltrow, quien ahora disfruta del matrimonio junto a Chris Martin, y también se casó con Jennifer Aniston.
Tiene una fundación dedicada al cuidado de los más desfavorecidos junto a Angelina Jolie. Se llama The Jolie-Pitt Foundation.
A Brad Pitt no le cuesta en absoluto engordar, adelgazar o transformarse si su papel así lo requiere. Para Troya ganó 10 kilos de masa muscular y en El Misterioso Caso de Benjamin Button lo vimos como nunca hemos imaginado.
Brad Pitt tiene prohibido aparecer en ningún anuncio que se emita en la televisión de Malasia. Las razones son no despertar envidias.
El actor no puede entrar en China desde que protagonizara Siete Años en el Tibet. Los motivos políticos lo han alejado de un mercado en el que podría ser muy famoso.
Brad Pitt tiene pasión por el diseño. Su primera colección de mobiliario así lo confirma, pero además ha diseñado sus anillos de compromiso.
El actor tiene licencia para pilotar aviones.
Los fans han descubierto que el actor sale comiendo o bebiendo siempre, en todas sus escenas rodadas.
El primer gran papel del actor llegó en 1991, en la película Thelma y Louise.
Tras el Huracán Katrina, Brad Pitt compró una casa en la devastada Nueva Orleans para animar a la gente a viajar hasta allí.
En 1989 protagonizó un anuncio de Pringles en la televisión estadounidense.