Plants VS Zombies, de tu iphone a la tele de tu salón
Repasamos la trayectoria de esta icónica saga tras ver la luz su nueva entrega: PvsZ Garden Warfare
Llevas años dejando tus huellas en la pantalla de tu móvil, organizando un ejército de plantas para que hagan frente a hordas y hordas de zombies que quieren pasar por encima de tu jardín. Plantas lanzaguisantes y carnívoras, alimentadas por girasoles y siempre plantando cara a esos desaliñados caminantes que intentan ganar terreno pasito a pasito.
EA te propone un cambio. Mete tu móvil en el bolsillo y coge el mando de tu consola. Deja el tower-defense de estrategia pura y dura a un lado y deja paso a un shooter con tintes de estrategia verdaderamente refrescantes.
Los modos de juegos que todos conocemos; todos contra todos, dominación de territorios... ya sabéis... Rotación de equipos en cada ronda para equilibrar el enfrentamientos y un sistema de cromos como recompensa que os permite comprar mejoras para vuestros personajes, que subirán de nivel de forma individual.
Los zombies funcionan como vuestro personaje favorito de Gears of War; apuntan, disparan, lanzan granadas, etc… pero además tienen opciones de desplazamiento interesantes como teleportaciones o saltos enormes que pueden situarlos en los tejados de las casas. Las plantas tienen algo más de innovación; carnívoras que excavan y aparecen en la espalda del enemigo listas para merendar, girasoles que recuperan vida con la luz solar y pueden curar a los aliados y los lanzaguisantes, que pueden plantarse en el suelo y funcionar como ametralladoras de posición. Son sólo un par de ejemplos para confirmar que Plants VS Zombies lleva el género shooter clásico un paso más allá.
Todos los modos de juegos tienen su atractivo, pero la dominación de terreno se lleva la palma. Una sucesión de asaltos zombies a terrenos que las plantas tienen que proteger. La estrategia de defensa es esencial; la organización y el buen uso de herramientas como las plantas de posición para frenar el avance de los caminantes, también acompañados de sus peones automáticos.
Pocos lo habrían dicho, pero esta revisión del clásico para móviles es una razón más que válida para que vayas pensando en canjear tu dinero por una Xbox One (si todavía no lo has hecho). Puedes jugarlo en Xbox 360 también, pero si tienes ocasiones de probarlo en Xbox One te darás cuenta de que ese extra en la resolución y, sobre todo, una tasa de 60 frames por segundo sólida y constante, son valor añadido suficiente como para pensar en actualizar el hardware de vuestro salón.
El juego pica como pocos, te obliga a permanecer en tu equipo partida tras partida; nunca verás el momento de apagar la consola. Es tremendamente atractivo y está cargado de sentido del humor. Tanto si eres de aquellos que disfrutaba en el autobús con el asedio tradicional, como si vienes de la masacre más absoluta de los shooters de esta última generación, en Plants VS Zombies Garden Warfare encontrarás un atractivo muy especial.