Cómo ligar por internet: Cibersexo

Después de recorrer varias aplicaciones como Tinder o portales para conocer gente y ligar como Badoo o Tinder, es hora de hablar de uno de los temas que siguen siendo tabú en el S.XXI: el cibersexo. Analizamos las ventajas y riesgos, donde se puede practicar y quién es el cibernauta idóneo.

Si estás viviendo una relación a distancia, vas a tardar alguna que otra semanita en verle y estás que te subes por las paredes puede servirte de vía de escape para que el fuego no se empiece a apagar y para que vuestra imaginación rompa las cadenas de la vergüenza.

#Ventajas

Empecemos por lo positivo. Como ventajas podemos utilizar el cibersexo con nuestra pareja para contarle nuestras fantasías y que se incrementen las ganas de un encuentro la próxima vez que os veáis.

Directo

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Probar experiencias nuevas. La música, la comida, las historias, los colores, una película que hayáis visto la noche anterior puede servir para que adoptéis roles diferentes y experimentéis cosas nuevas. No os olvidéis que siempre hay artilugios que pueden aumentar el placer personal, además de unas buenas manos.

Para los chicos hay multitud de ellos, más allá de las míticas muñecas hinchables. Este es un ejemplo para ellos, ¿aún no lo conocías?:

A base de hablar y hablar iréis perdiendo la vergüenza, encontrando más temas de conversación, resolviendo dudas y descubriendo curiosidades sobre la otra persona que hasta el momento igual no sabías, principalmente, sus gustos.

El cine y la literatura han constituido nuestras vías de escape para satisfacer nuestro deseo sexual en numerosas ocasiones. Aunque, normalmente solía ser en la más profunda intimidad, ahora no son pocos los que presumen por haber leído (y sentido) la saga de 50 sombras de Grey. Y hablando de la saga, estamos deseando que se estrene la primera de sus películas aunque aún nos quedan palomitas que comer hasta San Valentín de 2015.

#Riesgos

Más que riesgos, diríamos que problemas. Si no conoces a quién tienes al otro lado por mucho que hayáis hablado puede dártela fácilmente, poniendo otra fotografía de perfil que no sea la suya, fingiendo que no tiene webcam o micrófono... Hasta puede mentirte sobre la edad que tiene. Ahí es uno de los principales problemas, el tema de los menores. Cualquiera puede abrirse un perfil de Badoo, Tinder, Facebook y con pocas fotos que suba, podría ponerse en contacto contigo.

Otro de los riesgos conociendo al cibernauta o no es la difusión y grabación de las fotografías o vídeos que le envíes. Más allá de sus amigos podría hacerse viral y sería un auténtico marrón...

Otro de los problemas es no acabar satisfecho con la experiencia. A través de una cámara, un micrófono o el teclado puedes probar suerte pero difícilmente va a ser tan bueno como el sexo en vivo y en directo.

#Dónde

El Skype, el Facebook, el Whatsapp, Telegram y demás plataformas que sirvan para interactuar bien a través de la escritura o con elementos audiovisuales podrían servir para practicar cibersexo. ¡Hasta una llamada telefónica es capaz de hacerte tocar el cielo con los dedos ese día que las hormonas decidieron salir de procesión!

Si bien quieres probar experiencias nuevas, con precaución, los portales como Badoo o la aplicación Tinder podrían servirte para conocer gente, hablar y ¡darte una alegría al cuerpo!

#Cibernauta ideal

Si tu novio es el afortunado de esta experiencia y confías plenamente en él (aspecto importante), sería el cibernauta ideal para mantener relaciones a través de la red. Nosotros desconfiamos antes de alguien que nos acaba de decir ¿hola qué tal? y su foto es una selfie como las que se pueden hacer el domingo por la mañana en plena resaca.

Aún así si lleváis tiempo hablando y queréis probar nuevas experiencias, siempre puedes lanzarte a la piscina (con paracaídas incluso, por favor) y ver que se cuece más allá de los pixeles de tu pantalla.